El observatorio de la construcción insta a "dosificar" la oferta de vivienda

El primer congreso nacional sobre el mercado de la construcción, inaugurado ayer en Valencia, puso de relieve la solvencia del sector y las distintas posibilidades que se abren a los profesionales para sortear los riesgos de un brusco parón, la denominada burbuja inmobiliaria. Pero también permitió atisbar invitaciones a la prudencia en un ambiente de cierta euforia.

Lucía Irusta, responsable del Observatorio del Mercado de la Construcción creado hace un año por el instituto tecnológico del sector (Aidico), anfitrión y organizador del congreso, apuntó la necesidad de "dosificar la llegada de edificaciones al mercado para garantizar una gestión eficaz de las mismas y evitando una saturación de la oferta.

Irusta, que presentó los resultados del primer año de trabajos del observatorio, concluyó que todas las variables y expertos indican que "se mantendrá el crecimiento" que arrastra hace años el sector de la construcción, tanto en España como en la Comunidad Valenciana. Irusta reiteró que los actuales tipos de interés empujan la actividad del sector porque los "créditos hipotecarios" siguen siendo una "herramienta muy útil" para las familias. También subrayó el "margen de maniobra" que atesoran los empresarios valencianos en virtud de la amplía cartera de pedidos que garantiza la actividad durante varios meses y permitirá afrontar sin grandes riesgos variables externas que escapan al control de las empresas.

Emilio Ontiveros, responsable de Analistas Financieros Internacionales, deslizó algunos de los riesgos que escapan al control de los empresarios del sector, entre ellos el elevado endeudamiento que acumulan las familias españolas, el alza sostenida de los precios del petróleo o un eventual debilitamiento del multilateralismo como resultado de una situación internacional tensa.

Maria Carme Maltas, colaboradora de Estrategia y Formación, ofreció, por su parte, una optimista lectura de las posibilidades que ofrece la ampliación de la Unión Europea a los empresarios de la construcción. Maltas admitió la distancia de rentas de los países que se integrarán en la UE, pero destacó la precaria situación de su parque residencial y la necesidad de restaurarlo en gran medida.