Nantes celebra la décima edición de 'la loca jornada' con más de 200 conciertos

Hay que verlo para creerlo. En un largo fin de semana, del 28 de enero al 1 de febrero, Nantes, una población francesa de 260.000 habitantes, en la región del Loira, lindando con el Atlántico, ha programado 235 conciertos alrededor de la generación de 1810, es decir, en torno a músicos como Chopin, Schumann, Liszt o Mendelssohn. Es el décimo año que se celebra este tipo de manifestación con un éxito cada vez mayor, hasta tal punto que ha ampliado sus fronteras a lugares como Lisboa, desde hace cuatro años, o Bilbao, desde hace dos. Tokio es la última incorporación al proyecto, a partir de 2005.

Todo empezó tímidamente en 1995 con una loca jornada dedicada a Mozart, de la que se ocuparon algo más de 18.000 localidades en 34 conciertos. En sucesivos años, los músicos objeto de atención fueron Beethoven, Schubert, Brahms o Bach, o se abordaron temas como la música francesa o el barroco italiano.

En la edición que terminó el domingo se habían vendido más de 120.000 entradas, para un público entusiasta de todas las edades y condiciones. Le Monde de la Musique publica en su reciente número de febrero algunos datos referentes a la edición de 2003. No tienen desperdicio. El 62% del público procede de Nantes y su periferia. Los menores de 25 años suponen, al menos, un 12%. Un 10% de los espectadores son obreros y empleados. Prácticamente dos tercios del respetable son mujeres.

Público no habitual

Las sesiones se desarrollan en diez espacios diferentes de la Ciudad de Congresos, rebautizados para la ocasión con nombres como Hölderlin, Novalis, Hoffmann, Heine, Friedrich o Jean-Paul. El motor de toda la actividad es el vestíbulo central, con actuaciones permanentes de grupos locales. Dos de las salas están dedicadas a conferencias, y las otras siete, a conciertos de todo tipo desde las nueve de la mañana hasta pasada la medianoche. La mayoría de los conciertos tiene un formato de 40-45 minutos de duración, lo que facilita la incorporación de un público no habitual. Entre los intérpretes españoles que han participado este año están Josep Colom, Carlos Mena, la Sinfónica de Bilbao con Juanjo Mena o la Coral de Bilbao, entre otros. Sus esmeradas actuaciones han sido recibidas con mucho calor.

¿Un concierto para el recuerdo dentro del aluvión? Difícil papeleta. Así, a bote pronto, me quedaría con el quinteto para cuerda y piano La trucha, de Schubert, interpretado por Renaud Capuçon, Gérard Caussé, Gautier Capuçon, Aloïs Posch y Frank Braley. Fabuloso.

El canal de televisión Arte ha retransmitido varios de los conciertos y la mayoría de las revistas musicales francesas se han volcado con esta manifestación. Aunque sea en edición de bolsillo -algo menos de 50 conciertos-, la loca jornada recalará en Bilbao los días 12, 13 y 14 de marzo con la denominación Música-Musika.