Un hospital público dio datos personales de trabajadores a una clínica privada

Los sindicatos UGT y CC OO denuncian que el hospital público Puerta de Hierro ha cedido a la policlínica Clara del Rey, privada, un listado con los nombres, apellidos, teléfonos particulares, edad y número del DNI de varias decenas de trabajadores temporales, ex empleados y aspirantes a un empleo en el hospital. "Tienen todos los datos personales de auxiliares de enfermería y otros profesionales, sin que ninguno de los afectados lo haya autorizado", afirma Carmen Hermoso, de UGT. Un responsable de la clínica privada dice que los datos se los ha dado "un amigo".

UGT y CC OO denuncian que el hospital ha incumplido la Ley de Protección de Datos al ceder a otra institución privada información personal sin el consentimiento de los afectados. Éstos son personas sin contrato fijo con el hospital, que son contratados ocasionalmente para suplir las vacaciones o bajas laborales de los empleados fijos. También personas que nunca han trabajado en el Puerta de Hierro, pero que han dejado allí sus currículos.

Los hechos denunciados empezaron a producirse a principios de enero, cuando varias personas que han tenido relación laboral con el Puerta de Hierro, o que le han entregado sus currículos para trabajar en él, fueron llamados por la policlínica Clara del Rey para ser contratados.

"Me llamaron a casa y me dijeron si quería trabajar en la clínica. Les pregunté que quién les había dado mis datos y me contestaron que en el Puerta de Hierro. Lo tenían todo: nombre, apellidos, edad, el número de DNI, mi móvil...", explicó ayer una de las afectadas.

Ocho quejas

UGT y CC OO han recibido quejas de ocho empleados por este motivo. Los sindicatos sospecharon que los datos cedidos podían ser los de cientos de trabajadores. "Para comprobarlo, pedimos a dos ex trabajadores del hospital que llamaran a la clínica. Lo hicieron y dijeron que llamaban 'por lo del Puerta de Hierro'. Les contestaron con toda naturalidad y, efectivamente, también tenían sus datos. Puede pensarse que esto es poco importante, porque era para obtener un empleo. Pero en realidad es una violación muy grave de la intimidad de cientos de personas", explica Carmen Hermoso, de UGT.

El Puerta de Hierro no tiene una bolsa de trabajo oficial. Cuando necesita suplir a algún empleado, acude al Inem, según aseguró ayer una portavoz del centro. "Esto es algo que también venimos denunciando desde hace tiempo, porque nunca nos dan la documentación que les pedimos sobre estos trámites. Lo que hacen en realidad es tener una bolsa de trabajo oficiosa que tiene cada departamento y llaman a quien les da la gana", añade Hermoso.

Un responsable de la policlínica Clara del Rey calificó ayer de "tontería" estos hechos. "Necesitábamos suplir varias plazas. Y como en este sector nos conocemos todos, le pregunté a un amigo si sabía de alguien a quien pudiéramos contratar. Me dio cuatro o cinco nombres y teléfonos y les llamamos", dice.

Un portavoz del Puerta de Hierro, por su parte, admitió que los datos habían salido del hospital. "Hay mucha gente que nos deja aquí sus currículos y, si alguien nos pide información de gente a quien contratar, se la damos, ya sean hospitales públicos o privados", explicó esta portavoz. "Pero en ningún caso les dimos nuestra bolsa de trabajo, porque no tenemos. Y lo hacemos pensando en el bien de los trabajadores", añadió este portavoz.

Los dos portavoces restaron importancia a una cesión que las dos partes redujeron a "un listado con nombres y teléfonos". Ninguno de los dos dijo comprender que este hecho pudiera vulnerar la Ley Orgánica 15/1999, de 13 de noviembre, de Protección de Datos de Carácter Personal.

El artículo 6 de esta norma establece que "el tratamiento de los datos de carácter personal requerirá el consentimiento inequívoco del afectado" y, aunque establece algunas excepciones, en ningún caso permite que un hospital público pueda ceder a una institución privada datos personales ni de pacientes ni de trabajadores.

No es la primera vez que el hospital Puerta de Hierro tiene problemas con la gestión de datos personales. Hace justo un año, más de 1.500 informes médicos con nombres y apellidos de enfermos fueron encontrados en un contenedor, hecho que fue atribuido a la venganza de algún empleado del hospital por una cuestión laboral. El hospital apartó cautelarmente al responsable de los archivos médicos y la Agencia de Protección de Datos abrió una investigación, pero apenas unos meses después ésta fue archivada y el hospital dejó sin efecto la medida cautelar.