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Reportaje:

Conflicto real

La cámara de Reus, dispuesta a acudir ante el Rey para que Caixa Tarragona no convierta la lonja en un centro cultural

En 1309 se cumplía el séptimo año desde que la Gran Companyia Catalana y sus almogávares se embarcaron hacia Oriente para expandir los límites de la Corona de Aragón. Ese mismo año, el rey Jaume II otorgó a la ciudad de Reus la gracia de poder organizar un mercado cada lunes, y así se ha venido haciendo desde aquel entonces. Ahora, Caixa Tarragona, propietaria de la Llotja de Reus, inmueble en el que se celebra el mercado de los lunes, quiere convertir el edificio en un centro cultural que albergue exposiciones y actuaciones musicales y teatrales de pequeño formato. Los planes de la entidad financiera ponen en peligro la continuidad en este local de un mercado que todavía hoy es el que fija los precios de referencia de los huevos, las gallinas y los frutos secos a los mayoristas de toda España.

A las doce de la noche de ayer terminó el plazo que dio Caixa Tarragona a la Cámara de Comercio de Reus, promotora del mercado de los lunes, para que abandonara el inmueble; pero el secretario de ésta, Joan Josep Sardà, asegura que tienen "derechos de uso sobre este local" y que están dispuestos a defenderlos en los tribunales. Incluso, si hace falta, ante don Juan Carlos, sucesor, asegura Sardà, de Jaume II y, por tanto, actual valedor de los derechos que el entonces rey de Aragón, Valencia, Cerdeña y Córcega, y conde de Barcelona, otorgó a la ciudad de Reus.

En concreto, Jaume II estipuló un castigo de 500 monedas de oro para quien perturbara el buen funcionamiento del mercado de los lunes. "Es la institución más antigua de Reus", destaca Sardà, y añade que la capital del Baix Camp creció precisamente gracias a su situación estratégica en un cruce de rutas comerciales y a su mercado.

Caixa Tarragona recuerda que el mercado de los lunes, actualmente con escasa presencia de público, en su mayor parte jubilados, sólo lleva celebrándose en la Llotja de Reus desde 1972. La entidad financiera asegura que está dispuesta a negociar con la Cámara de Comercio alguna solución, aunque difícilmente el proyecto de centro cultural que están ultimando permitirá la coexistencia de ambas actividades. Ante esta situación, la cámara piensa abrir el lunes que viene el tradicional mercado y no tiene intención de abandonarlo a no ser que un juez se lo ordene. "Si en 1972 acordamos con Caixa Tarragona las condiciones de uso actuales, solamente las deberíamos poder modificar también con otro acuerdo", sentenció Sardà.

Caixa Tarragona tampoco piensa retirar su proyecto, que incrementaría la oferta cultural de Reus, con lo que todo apunta a que serán los tribunales los que finalmente decidan.

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