El Ayuntamiento amplía su capacidad informática para imponer 14.000 multas diarias, el doble que ahora

Los técnicos del Ayuntamiento de Madrid, que preside Alberto Ruiz-Gallardón, del PP, tienen prácticamente concluida la tarea que se les encomendó de ampliar la capacidad del sistema informático municipal para que éste pueda tramitar el doble de multas de tráfico que ahora.

Tras estas innovaciones, los ordenadores podrán asumir diariamente unas 14.000 multas o sanciones municipales. En los presupuestos municipales de 2004 se refleja la intención del Ayuntamiento de imponer cinco millones de multas de tráfico durante 2004, el doble que en 2003. El actual sistema informático era incapaz de tramitar tal volumen de denuncias, 14.000 diarias, y por eso el Ayuntamiento ha decidido ampliar la capacidad de sus ordenadores para poder procesarlas y cobrarlas.

En la actualidad, según fuentes municipales, los agentes imponen una media de 7.000 denuncias de tráfico al día en la capital. De ellas, 2.500 son por infracciones de tráfico y unas 4.500 por aparcar en zonas reguladas sin abonar el preceptivo tique. Si se multiplican esas 7.000 multas diarias por los 365 días del año, arroja un resultado de 2.555.000 multas. Una vez que se dé la orden para que entren en funcionamiento los nuevos programas informáticos, con mucha más capacidad, la idea es imponer unas 14.000 multas diarias, y la recaudación, sólo por este concepto, también será el doble. En Madrid hay 1,6 millones de conductores.

Estas cifras coinciden a grandes rasgos con las que figuran en los presupuestos del Ayuntamiento de Madrid para 2004, cuando el regidor ha estimado que 5 millones de vehículos serán multados, frente a los poco más de 2,5 que acabaron con una multa en el parabrisas el año recién terminado. El Consistorio justifica este importante incremento en el número de infracciones con el argumento de que se va a ampliar a otros 12 distritos el Servicio de Estacionamiento Regulado (SER). La ampliación se hará antes de noviembre, según el Ayuntamiento. De tal forma que las 32.000 plazas de aparcamiento reguladas que hay en la actualidad en la capital serán ampliadas a 64.000, ya que se van a poner establecimientos regulados prácticamente en toda la almendra central de Madrid.