Madrid y Las Palmas se reparten los dos primeros premios de 'El Niño'

Madrid apostó 98,7 millones de euros a la lotería de El Niño y la suerte le ha devuelto 64 millones, a razón de 160.000 euros por cada uno de los 400 décimos vendidos del número 19.459. Todo para Madrid y todo menos una serie -se la llevó un abonado de la calle de Bravo Murillo- para el barrio de Carabanchel, popular y populoso. El segundo premio, el que recayó sobre el 44.031, lo vendió un lotero de Las Palmas que ahora se va a EE UU a estudiar antropología.

La tradición del juego dice que el premio que todos buscan es el Gordo de Navidad y que el sorteo de El Niño es casi de consolación. Pero a Juani Muñoz y Leandra Gómez, vecinas de toda la vida en el número 50 de la calle de Laguna, una arteria comercial de Carabanchel, más que consolación fue un alegrón. Entre las dos se van a repartir "26 millones de pesetas", para, como no, "tapar agujeros" y, algo más exótico, "hacer un viaje al Caribe".

Ambas habían comprado el décimo en la administración 117, sita en el número 113 de la calle de La Laguna, donde se han vendido 39 series del 19.459. "Ha sido décimo a décimo en ventanilla, sí, por eso está muy repartido, sobre todo entre gente trabajadora e inmigrantes del barrio", explicaba Luis Gómez, el administrador. "Aquí tenemos todas las semanas ese número desde hace años, pero nunca había tocado nada; ahora se ha acabado la sequía", agregaba.

El número (menos una serie) lo solía vender un quiosquero del barrio, pero el hombre ya se jubiló. "Pero como había mucha gente que quería jugar a ese número, pues nos lo quedamos", asegura Gómez. La otra serie fue vendida en la administración 139, situada en la avenida de la Reina Victoria, pegada a la glorieta de Cuatro Caminos.

Rosario Alonso de Mota, la dueña, explicó que la serie se la había llevado un vecino de unos 50 años que tiene una histórica fília por el 19.459. Tanta fijación le va a reportar ahora 1,6 millones de euros. "Él suele comprarlo para repartirlo luego, pero esta vez no sé si habrá sido así", señalaba la lotera.

La suerte resarcía así parcialmente la apuesta de los madrileños por la lotería de El Niño, ya que Madrid comunidad ha desembolsado 98 millones de los 644.229.700 euros que Loterías y Apuestas del Estado ha recaudado con esta timba. Como el 70% es lo que se destina a premios, quien no haya ganado nada puede consolarse, aunque sea poco, con los 193.268.910 euros que se quedará para sí el Estado para restarlo de los impuestos que hay que pagar cada año.

Y, como el premio está exento de pagar impuestos, ayer apareció por Carabanchel un ciudadano que ofrecía comprar décimos premiados con el reclamo de un par de millones de más y una comisión para cualquier intermediario que le pusiera en suerte al afortunado. "Es que como está exento del fisco, pues hay gente a la que le interesa", decía.

La otra gran cesta de dinero, la del segundo premio (44.031), se repartió desde la administración sita en el centro comercial Las Arenas de Las Palmas de Gran Canaria, informa Juan Manuel Pardellas. David Gil Jiménez, de 29 años, lo repartió en su administración, la número 16, y la cerró el martes pasado para dedicarse a estudiar Antropología. Esta administración recibió las 40 series del 44.031. Según su propietario, hasta la misma víspera de Reyes, el número apenas se había vendido, por lo que tuvo que devolver 15 series. El joven vendió 25 series (que repartieron 20 millones de euros) y no se quedó ningún décimo. "A nadie le gustaba ese número", hasta el punto de que un abonado que tenía de la isla de La Palma le dijo que, por primera vez en cinco años, no lo compraría. "Hoy se tiene que estar tirando de los pelos", declaró más tarde Gil.