Arma de destrucción masiva

Hace unos días vi en el programa La columna de TV-3 un reportaje que me produjo indignación: en EE UU se exhibe el Enola Gay, el avión que tiró la bomba atómica sobre Hiroshima el 6 de agosto de 1945. En el reportaje aparecían supervivientes japoneses que iban a verlo. En sus caras llevaban las marcas de su mortífera vivencia y su dolorosa supervivencia. También se veían pacifistas con carteles en los que podía leerse: "150.000 muertos".

Julia Otero comentó: "Esto es una auténtica arma de destrucción masiva". Este avión provocó muchas más muertes y secuelas que los dos Boeing que derribaron las Torres Gemelas el 11 de septiembre. El acto terrorista de Nueva York causó unas 5.000 víctimas. Así pues, el Enola Gay las superó en 145.000 muertos. ¿Cómo es posible que no se pidan responsabilidades a los terroristas que cometieron este genocidio? ¿Cómo pueden ejercer el poder del mundo sus sucesores, que no sólo exhiben sus armas de destrucción masiva pasadas, sino que tienen abundancia de las actuales, y no escondidas precisamente? ¿Cómo es posible que los medios de comunicación no hayan dado difusión a esta noticia, como se hace con todo lo relativo a otro terrorista, Sadam Husein? Agradecería cualquier tipo de aclaración a mis interrogantes.