El PP achaca la idea a "la estela" de Maragall y Chaves

El PP y el Gobierno se volcaron ayer en criticar el anuncio del candidato socialista a la presidencia del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de defender en su programa electoral un nuevo modelo de financiación autonómica para asegurar en mayor medida la autonomía financiera y la cohesión y solidaridad entre territorios.

Uno de los instrumentos para conseguir ese objetivo, según el PSOE, será la creación de agencias tributarias autónomas que actuarán en consorcio con la Agencia Tributaria central. Esta oferta se achaca en el PP a la necesidad de Zapatero de seguir la estela de algunos barones del PSOE, como el presidente de la Generalitat de Cataluña, Pasqual Maragall, y el de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, que han planteado el cambio del modelo de financiación de sus respectivas comunidades.

Por parte del PP salieron ayer a denostar la oferta de Zapatero el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro; el candidato a la presidencia del Gobierno, Mariano Rajoy; el director de la campaña electoral del PP, Gabriel Elorriaga, y el portavoz de Economía, Vicente Martínez Pujalte.

Por parte del PSOE habló en el Congreso de los Diputados el responsable de Economía y Ocupación federal, Jordi Sevilla, con el aplauso del portavoz parlamentario, Jesús Caldera, y del responsable de Desarrollo Autonómico, Juan Fernando López Aguilar.

"La defensa de un modelo de financiación diferente para cada comunidad autónoma" fue criticada por Elorriaga, mientras que Rajoy se centró en la "necesidad de Zapatero de hacer esta propuesta para que agrade a ERC". Montoro y Pujalte hicieron mención expresa a los barones del PSOE como impulsores de esa medida "lamentable" y recordaron que una modificación del actual modelo requiere "la unanimidad" de los Gobiernos autónomos.

Sevilla les replicó que la propuesta de Zapatero no es nueva, ya que en octubre de 2001, según figura en el diario de Sesiones del Congreso, cuando el PSOE votó en contra del modelo de financiación finalmente aprobado, ya advirtió de que cuando tuviera votos suficientes lo cambiaría.

Sevilla recordó que los socialistas propusieron además un cambio de la actual Agencia Tributaria para evitar que fuera "la agencia del Gobierno" y que pueda gestionar "de forma profesional y eficaz todos los impuestos de todas las Administraciones, a través de fórmulas como puede ser la del consorcio con las comunidades autónomas para dar participación a esos gobiernos". Sevilla defendió que las autonomías deben participar en la gestión de los tributos porque "también son Estado".