El Ayuntamiento de Barcelona dedicará más del 7% de su presupuesto a cultura en 2004

El Ayuntamiento de Barcelona dedicará el 7,15% de su presupuesto a cultura durante 2004. Es un porcentaje altísimo teniendo en cuenta que la media destinada a cultura en los ayuntamientos suele oscilar entre el 2% y el 3% de sus presupuestos generales y tiene como principal explicación la celebración el próximo año del Fòrum Universal de les Cultures. Del total de 130,6 millones de euros destinados a cultura, 40 millones se dedicarán en exclusiva a las actividades relacionadas con el evento. Si se obvia este fondo, el porcentaje sobre el presupuesto municipal es del 4,95%.

La cultura se está convirtiendo en un factor estratégico en el desarrollo económico y social de Barcelona. La actividad turística se nutre de la cultural y la cohesión social depende en gran parte de la capacidad de los ciudadanos de acceder en igualdad de condiciones a la cultura. El Ayuntamiento de Barcelona ha iniciado en los últimos años un continuado aumento de sus presupuestos. En 2003, la aportacion municipal al Instituto de Cultura de Barcelona (ICUB) fue de 68,078 millones de euros y en 2004 será de 73,226 millones. Además, este organismo que se encarga de la política cultural municipal obtiene recursos propios, por lo que está previsto que su presupuesto final sea de 80,127 millones de euros. En 1999, cuando se creó el organismo, el presupuesto fue de 57 millones de euros.

Esto, por lo que se refiere al ICUB, pero las actividades culturales del Ayuntamiento se desarrollan también en los distritos. Con el nuevo gobierno municipal tras las elecciones de marzo, este apartado es responsabilidad del concejal de Cultura y portavoz municipal, Ferran Mascarell, que preside la Comisión de Cultura, Educación y Bienestar Social. El presupuesto dedicado a los distritos pasará en 2004 de 9,277 millones de euros a 10,566 millones. Hay que tener en cuenta que en este apartado se incluyen las bibliotecas municipales, que el pasado año tuvieron tres millones de usuarios, realizaron dos millones de préstamos y expedieron 300.000 nuevos carnets. También está previsto reimpulsar la actividad de los centros cívicos, que en los últimos años habían bajado la intensidad de su primera época.

"Es el presupuesto más alto que nunca habíamos tenido en la ciudad y creo que en cualquier ciudad española", indica Ferran Mascarell. "Ahora bien, hay que tener en cuenta que es excepcional porque es imposible mantenerse en estos porcentajes". En 2004, el Ayuntamiento de Madrid ha previsto destinar a su concejalía de Las Artes unos 98,3 millones de euros, lo que supone un considerable aumento respecto al año anterior, ya que incluye la inversión en nuevos centros culturales, y el de Valencia, más pequeño en cuanto a población, destinará a cultura 28,1 millones.

En Barcelona, es posible que este mayor esfuerzo en cultura, que durante años ha realizado casi en solitario la ciudad asumiendo gastos en equipamentos nacionales que en teoría correspondían a la Generalitat, pueda redistribuirse en el futuro si se cumple el acuerdo de gobierno de 500 puntos que firmaron el pasado 14 de diciembre los tres partidos que integran el nuevo Gobierno de la Generalitat. En el mismo se comprometen a duplicar en cuatro años el presupuesto destinado a Cultura. Esto supondría pasar de los 242 millones de euros de 2003 a 484 millones en 2007.

Duplicar en la Generalitat

Durante la campaña, los mismos partidos hablaban directamente de duplicar el presupuesto en un año, reconociendo así la infravaloración que de este ámbito realizaba hasta ahora el Gobierno autónomo. El acuerdo es más cauto y emplaza el aumento a cuatro ejercicios, pero aun así supone, a juicio de Mascarell, un aumento fundamental. "Esto querría decir que se destinaría a cultura el 2% o el 2,5% del presupuesto de la Generalitat, y es ya un porcentaje importante comparado con el 1,2% actual", afirma.

Ferran Mascarell no quiso evaluar el nombramiento de la nueva consejera de Cultura, Caterina Mieras, aunque indicó que "sin duda, el cambio afectará positivamente a todos aquellos aspectos en los que la Generalitat y el Ayuntamiento tienen responsabilidades compartidas".

Entre los objetivos del próximo año, Mascarell destaca el inicio de una campaña para controlar la calidad de la oferta cultural de la ciudad a través de encuestas y otros sistemas. "No sabemos todavía con qué mecanismos lo haremos, pero igual que hay un control de calidad industrial, tiene que existir algo similar en la cultura. Hasta ahora sólo se cuantificaba el número de visitantes o usuarios, y es un dato que hay que tener en cuenta, pero también es importante la calidad y la manera en que la ciudadanía evalúa esta oferta", indicó.