"La solución se basa en consensos entre las dos tradiciones del país"
Jonan Fernández recibe estos días el goteo de adhesiones a la manifestación auspiciada por Elkarri que recorrerá las calles de Bilbao reclamando diálogo.
Pregunta. ¿Qué espera de la movilización de mañana?
Respuesta. Tiene dos claves. Por un lado, trata de defender el diálogo y el debate entre todas las propuestas de convivencia que están planteadas en este momento, porque pensamos que dentro de ese debate está la solución posible y fuera de él, sólo hay bloqueo y crispación. Por otro lado, trata de impulsar el diálogo multipartito que queremos llevar a partir de marzo. Aspiramos a llenar la calle Autonomía de Bilbao y, entre las adhesiones anunciadas, habrá una representación de la ejecutiva socialista.
"La idea de que la violencia es un anacronismo se ha instalado en amplios sectores 'abertzales"
P. Puede interpretarse como una contramanifestación a la celebrada el sábado organizada por Basta Ya.
R. Puede parecer, pero nuestra manifestación está convocada hace muchos meses, coincide con nuestro 11 aniversario y hemos tenido especial cuidado en no dar ningún mensaje negativo. La manifestación de Basta Ya se merece todo nuestro respeto; ha reflejado una manera de ver y de interpretar este país y la nuestra va a reflejar otra.
P. Habla de una manera y otra de ver Euskadi; ¿no se trata, en definitiva, de un pulso en la calle que aporta poco y puede hasta ser contraproducente?
R. Nosotros no lo planteamos así, sino que en este país hay mucha inquietud movilizadora. Además, las dos tienen enfoques diferentes: la de Basta Ya estaba planteada contra el plan del lehendakari, mientras nosotros proponemos impulsar un proceso de diálogo.
P. Su insistencia en el diálogo cuando los interlocutores dicen que, mientras persista la violencia éste es imposible, ¿no les coloca en uno de los lados?
R. No necesariamente. Somos muy críticos con la política del Gobierno de Madrid que ha proscrito el diálogo, algo que es un desastre para la política, pero hay puntos de encuentro con el resto de fuerzas políticas. Queremos rescatar el diálogo como la columna vertebral, lo contrario es imposición y unilateralidad.
P. Se refiere al Gobierno del PP, pero el PSE también rechaza el debate sobre el Plan Ibarretxe mientras persista la violencia.
R. No creemos que el PSE esté rechazando el debate; rechaza aspectos de la propuesta del Gobierno vasco, pero está dispuesto a debatir en el parlamento por medio de sus planteamientos, incluso ha presentado su propuesta de más Estatuto. Esto es lo que tratamos de promover: que se lleve a cabo un debate entre las diferentes propuestas.
P. Carod Rovira ha aludido a la situación de "empate infinito" que caracteriza a Euskadi, cómo se pondría fin a ello?
R. Poniéndose de acuerdo en las bases de un proceso de diálogo. El principio del final está en establecer cómo vamos a dialogar para buscar el acuerdo.
P. ¿Qué valor tiene el que un colectivo exija una tregua a ETA y qué efecto puede tener?
R. Es difícil sabér qué efectividad puede tener un gesto como éste. Lo cierto es que refleja un estado de ánimo y de opinión contrario a la violencia de sectores sociales muy marcados por la identidad abertzale o euskaltzale. Concuerda con una opinión inmensamente mayoritaria en la que la no violencia y los derechos humanos han adquirido una fuerza irreversible y todo lo que tiene que ver con la violencia se ve como un anacronismo.
P. Pues parece que ETA sigue sorda a todos los mensajes que se le envían desde cualquier ámbito.
R. Sin ninguna duda. En este momento tan interesante en el que se da la posibilidad de un debate político de fondo sobre la convivencia y sus soluciones, la violencia, además de generar sufrimiento y ser éticamente inaceptable, representa una distorsión y un obstáculo.
P. La propuesta de un bloque electoral nacionalista ¿ayuda a una futura solución?.
R. Políticamente, nos parece que está dentro de lo legítimo. Pero, cara a un proceso de paz, lo importante es no perder de vista la necesaria transversalidad y pluralidad. Si tomamos como referencia lo que pasó en Irlanda, ahí se dio un acuerdo entre nacionalistas, pero hubo en todo momento claridad de defender que la solución tenía que darse mediante consensos básicos entre las dos grandes tradiciones políticas de Irlanda.Aquí hay que tener claro lo mismo. La solución y la convivencia de futuro tiene que asentarse en consensos básicos entre las dos grandes tradiciones.
P. ¿Me viene a decir que un bloque nacionalista no es necesariamente un muro, aunque en este momento delicado podría convertirse en un muro más alto?
R. Depende. En Irlanda supieron hacerlo de una manera abierta; es decir, supieron combinar la legitimidad de una acción entre unos partidos con la claridad en todo momento deque había que buscar el consenso con los otros. No perder de vista esa idea es importante.
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