Zapatero propugna un "impulso autonómico" y Aznar alerta sobre el riesgo de "secesión"
El líder socialista aboga por reformar los estatutos y el presidente del Gobierno se opone
El secretario general del PSOE y el presidente del Gobierno escenificaron ayer en Andalucía sus abismales diferencias sobre el futuro del Estado de las Autonomías. José Luis Rodríguez Zapatero proclamó en Málaga "la necesidad de un nuevo impulso autonómico" que requiere reformas de los estatutos de autonomía y una revisión de la Constitución. Para ello puso como requisito indispensable el consenso. La respuesta de Aznar, en Cádiz, fue contundente, en contra de todas las propuestas de modificación que, a su juicio, "ponen en riesgo la unidad nacional" y "persiguen la secesión".
"Es necesario abrir una etapa de impulso autonómico, que supone modificar y hacer reformas", dijo Zapatero. Además de las propuestas ya conocidas del PSOE -la conversión del Senado en una Cámara de representación territorial, la participación de las comunidades autónomas en el proceso de construcción europea y la creación de una conferencia de presidentes autonómicos-, el líder socialista apostó también por poner en marcha reformas de los estatutos de autonomía. El objetivo es "garantizar nuevos derechos y atender nuevas necesidades, después de muchos años de vigencia de estos estatutos".
Estas reformas, añadió, deben partir de dos principios "muy claros": el respeto con el marco constitucional y que reúnan un amplio consenso. Insistió además en que las propuestas reformistas del PSOE "están muy lejos, obviamente, de los intentos rupturistas" que supone el plan Ibarretxe, por lo que pidió al PNV que dé un paso atrás y retire un proyecto "que no conduce a ninguna parte".
"Un proyecto de país que se precie de moderno debe ser dinámico, vivo y cambiante", explicó Rodríguez Zapatero, quien tachó de "profundo error" el "inmovilismo de la derecha". Para el líder del PSOE, "la defensa de las autonomías y de la España plural ha sido sustancial para que estos 25 años de prosperidad y libertad hayan sido felices".
José María Aznar reiteró su rechazo a reformar la Constitución "en estos momentos" porque las propuestas presentadas hasta ahora sólo "persiguen la secesión" y "ponen en peligro la unidad nacional". A su juicio, cualquier reforma constitucional "conduciría" a la ruptura de "al menos uno" de los cuatro "consensos básicos" que consagró la Constitución de 1978: el régimen político, las libertades públicas, el equilibrio de poderes y la unidad de España, organizada en comunidades autónomas. "Debemos ser conscientes, en consecuencia, de que determinadas propuestas no buscan mejorar el texto actual de la Constitución, sino que buscan, pretenden y adonde nos conducen es a un cambio de régimen político. No buscan reformar unos determinados artículos, sino dar por cancelada una idea de la unidad nacional organizada en comunidades autónomas y crear un nuevo sistema que abra el camino y la posibilidad de la secesión. Ninguna razón presentada hasta ahora que yo conozca justifica abrir el delicado mecanismo de la reforma constitucional", subrayó.
Aznar aventuró que sus manifestaciones serán interpretadas por "algunos como dogmatismo o incluso como cerrazón". "Lo que están planteando algunos es muy serio, cuando en Europa no existe un Estado con mayor capacidad de autogobierno para las comunidades autónomas que España", afirmó en el discurso que pronunció para conmemorar el 25º aniversario de la Constitución en el Oratorio San Felipe Neri, sede de las Cortes de Cádiz, que aprobaron la Constitución de 1812.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.