El Fòrum quiere que CiU siga vinculada a su organigrama para mantener el consenso
La dirección del evento y el Ayuntamiento de Barcelona buscan fórmulas de integración
"El cambio político en la Generalitat afecta al organigrama del Fòrum y desde la organización pensamos que sería malo que alguno de los partidos importantes del arco parlamentario catalán quedara excluido", indicó ayer en referencia a Convergència i Unió (CiU) el director general del Fòrum 2004, Jordi Oliveras, durante una presentación del programa de contenidos del evento. Desde el Ayuntamiento de Barcelona también se apuesta por una fórmula que permita integrar a la formación nacionalista.
El consorcio organizador del Fòrum Universal de les Cultures está integrado por representantes, a partes iguales, del Ayuntamiento de Barcelona, el Gobierno español y la Generalitat. Aunque la representación es institucional, al estar hasta ahora cada Administración gobernada por partidos de signo distinto, todas las formaciones políticas que configuran el arco parlamentario catalán estaban representadas en los principales órganos de gestión del evento. Tras el pacto de izquierdas en el gobierno de la Generalitat, los representantes de CiU, cesarán en su cargo y, en principio, la formación nacionalista se queda sin ningún representante en el organigrama.
"Desde la organización querríamos que se mantuviera el consenso político que rige el evento desde su fundación", indicó ayer Oliveras, para quien "sería mejor que todos estuvieran representados". Aunque Oliveras no señaló qué mecanismo permitiría que CiU mantuviera su representación, apuntó más tarde que una posibilidad sería que entre los siete representantes de la Generalitat en el Consejo de Administración se designara a algunos de este partido.
Voluntad política
Según recordó ayer Ferran Mascarell, vicepresidente del Fòrum, concejal de Cultura y portavoz del Ayuntamiento de Barcelona, esta misma posición la expresó el pasado jueves el alcalde de Barcelona, Joan Clos, que ostenta la presidencia, al finalizar la última reunión del Consejo de Administración durante la que se despidieron los representantes de la Generalitat. "La fórmula aún no está definida, pero sí existe el principio de que todas las fuerzas políticas que han participado en la organización desde el principio mantengan su representación durante estos últimos meses", comentó Mascarell.
"Agradezco la reflexión que ha realizado Jordi Oliveras y entiendo por qué lo dice", señaló ayer Carles Duarte, que ha ocupado una de las tres vicepresidencias por la Generalitat. "Pero ahora ha habido un cambio de gobierno y es el nuevo el que tiene que tomar una decisión. Cualquiera que sea esta decisión me merecerá un gran respeto y lo último que querría es que pudiera deducirse cualquier asomo de presión. No querría en absoluto interferir en el debate sobre este tema".Jordi Oliveras presentó ayer en el Colegio de Periodistas de Cataluña los contenidos del Fòrum a cinco meses de su inauguración, que se celebrará el día 8 de mayo. Como es habitual, no fue la programación concreta la que acaparó la atención de los informadores, sino los aspectos ideológicos y políticos que rodean el acontecimiento, al que la Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona (FAVB) ha decidido no sumarse y que ha provocado la creación de una Asamblea de Resistencias al Fòrum 2004 integrada por colectivos de diversas procedencias.
"La credibilidad de la voluntad de diálogo del Fórum se resentiría si fuera excluyente, pero no lo es", indicó Oliveras. "Tienen la puerta abierta para integrarse cuando quieran, pero lo que no podemos hacer es forzar la inclusión. Es verdad que hay movimientos antiglobalizadores que han manifestado su oposición al Fòrum, pero hay otras 350 asociaciones cívicas y grandes agencias internacionales que estarán presentes". Oliveras añadió: "Las manifestaciones de rechazo al Fòrum que puedan producirse durante el evento son bien recibidas siempre que este derecho a la disensión se ejerza con respeto. Nadie puede patrimonializar los valores del Fòrum y decidir quién los representa y quién no". El director general del evento afirmó que se ha hablado con el entorno disidente con el Fòrum y las opiniones están divididas. "Es verdad que hay un debate sobre si estos valores pueden defenderse desde dentro del sistema o no, pero este es otro aunto", añadió. "Lo que está claro es que el Fòrum es una oportunidad para propagarlos y hay gente que lo ha entendido y otra que no. Lo que pedimos es el mismo respeto que nosotros ejercemos con los que piensan diferente".
Uno de los estandartes que han enarbolado algunos de estos colectivos disidentes es la figura de Noam Chomsky. Frente a quienes celebran que el intelectual estadounidense haya denegado supuestamente la invitación a participar en alguno de los debates, Oliveras no quiso confirmar ni desmentir su asistencia porque, indicó: "Puede que venga y puede que no, pero lo que no haremos será convertirlo en un emblema ni centrar todo el evento en un reducido número de personalidades". La coordinadora de los diálogos del Fòrum, Mireia Belil, señaló ayer que hasta la fecha el nombre de Choms ky figuraba sólo como propuesta en varios debates y que hasta esta misma semana no se ha cursado la invitación oficial.
Empresas patrocinadoras
Otro asunto conflictivo son las críticas que realizan algunos colectivos disidentes sobre la relación de algunas empresas patrocinadoras o socias del acontecimiento con actividades que a su juicio podrían contradecir los valores del Fòrum al estar, por ejemplo, relacionadas con la industria armamentística, como es el caso de Indra. "A todas las empresas les hemos pedido que asuman el compromiso de la agenda de principios y valores del Fòrum y lo han suscrito", indicó Oliveras. "Entendemos que esta es una crítica a la que podemos estar expuestos, pero no todo el mundo ve las cosas de la misma manera". Más tarde, comentó que tendrían que ser las instancias judiciales las que, en todo caso, decidieran si alguna empresa ha incumplido el compromiso adquirido.
El director del Fòrum se mostró convencido del éxito del evento, que servirá, indicó, "para reacreditar la capacidad de Barcelona y de Cataluña no sólo como buena gestora, sino también como creadora de valores y contenidos". En este sentido señaló que "la organización puede ser criticable, pero el evento en sí no tiene que serlo". También se refirió Oliveras a la visita al Fòrum que realizó el pasado martes José Maria Figueres, director general del Foro Económico Mundial -que se reúne anualmente en la ciudad suiza de Davos-, quien indicó su confianza en que el Fòrum 2004 sirva de "punto de encuentro" entre Davos y el Foro Social Mundial de Porto Alegre. "Hace tiempo que nos definimos con esta propuesta de diálogo entre los dos foros, y esta voluntad la ha asumido ahora Figueres y la asumió en su día el alcalde de Porto Alegre".
Oliveras había iniciado su presentación con un "felices fiestas de invierno". "En el Fòrum no decimos fiestas de Navidad, sino de invierno para que no puedan acusarnos de parciales en relación con ninguna religión". El regalo, añadió, es el programa de contenidos.
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