_
_
_
_
Entrevista:INMACULADA AGUILAR | Presidenta de la Asociación Valenciana de Arqueología Industrial

"El tren fue una revolución como Internet"

Miquel Alberola

Pregunta. ¿Por qué entre toda la arqueología industrial se especializó en la ferroviaria?

Respuesta. Es al contrario. Entré en la arqueología industrial a través de todos los trabajos que realicé sobre el ferrocarril. Mi primer trabajo fue una biografía sobre Demetrio Ribes, el arquitecto de la Estación del Norte de Valencia. Entonces me di cuenta del interés que tenía. Coincidió que trajeron en 1980 una exposición de estaciones de ferrocarril del Centro George Pompidou, y con el catedrático que dirigía mi tesis hicimos una en el Palacio de Velázquez de Madrid. Un año después hice lo mismo en Cataluña, y ya no paré. Y como el primer estudio que se hizo de estaciones fue el mío, pues se me quedó el sambenito.

P. ¿Cómo es nuestro patrimonio ferroviario?

R. Enorme, riquísimo. No se puede hablar de un estilo propio porque son sistemas que funcionan en toda Europa y poco cambian de un sitio a otro. Dependiendo de las épocas sí que se buscan estilos regionales, y el marketing de las empresas ferroviarias puede conformar un carácter de la zona. En ese sentido, la Estación del Norte explica la vegetación y los motivos regionales al viajero.

P. ¿Es nuestra mejor estación?

R. Sin duda. Puede ser entre las cuatro mejores de España y entre las diez mejores europeas.

P. ¿Una estación era algo más que una terminal a la que llegaba la gente?

R. Como cualquier arquitectura de empresa, era la sede de la empresa, lo que se veía. Los ferrocarriles eran privados, y la competencia entre las distintas compañías llevaba a que todas quisieran hacer la mejor estación. Ahora vuelve a potenciarse de nuevo la arquitectura en las estaciones con Moneo, Calatrava,...

P. ¿Hasta qué punto el ferrocarril nos ha hecho como somos?

R. Totalmente. El cambio que supuso en el siglo XIX fue una revolución como la de Internet en el siglo XXI. El pensamiento, el comercio, la movilidad, los tiempos, la economía, el paisaje... Afectó a todo: la literatura, la pintura,... Fue un impacto en todos los sentidos. De repente se abrieron las comunicaciones como nunca.

P. Lleva varios años preparando el proyecto del Museo del Transporte y del Territorio.

R. La idea es plantear un museo no como colección de vehículos sino implicado en el territorio. Cronológicamente, va desde el mundo ibérico hasta nuestros días, y recogemos todo lo que que se ha construido en el territorio con respecto al transporte tanto de viajeros como de mercancías, agua e incluso telecomunicaciones. Abarca la ingeniería civil a todos los niveles: caminos, puentes, ferrocarriles, empresas, canales, puertos.... Se trata de contar la historia de las obras públicas en la Comunidad Valenciana, y es la primera vez que lo va a hacer una comunidad autónoma.

P. ¿Para cuándo?

R. Estaba ya proyectado para 2007. La idea es ubicarlo en las cuatro naves sin uso de Demetrio Ribes que están en los terrenos de Renfe del futuro Parque Central. Según el proyecto, el museo estará semienterrado y las naves serán para uso público.

P. ¿Valencia ha perdido mucho patrimonio arqueológico?

R. Se ha derribado muchísimo. Empecé a hacer un inventario del patrimonio industrial de la Comunidad Valenciana hace siete años, y cuando tuve que hacer el de Valencia había en el plan general unos 260 edificios catalogados. Sólo pude ver unos ochenta. Los demás ya no estaban. Imagino que ahora la mitad de los que vi deben de haber caído.

EN DOS TRAZOS

Inmaculada Aguilar (Valencia, 1952) lleva 20 años estudiando el ferrocarril y es, a tenor de los libros que ha publicado al respecto y las exposiciones montadas, una de sus máximas especialistas. Desde hace unos años, y desde la cátedra Demetrio Ribes, constituida a instancias de la Universitat de València y la Consejería de Infraestructuras y Transportes, está preparando el proyecto del Museo del Transporte y el Territorio, una propuesta singular en España que tratará de poner en valor el patrimonio de la ingeniería civil realizada en la Comunidad Valenciana desde los tiempos de los iberos.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Miquel Alberola
Forma parte de la redacción de EL PAÍS desde 1995, en la que, entre otros cometidos, ha sido corresponsal en el Congreso de los Diputados, el Senado y la Casa del Rey en los años de congestión institucional y moción de censura. Fue delegado del periódico en la Comunidad Valenciana y, antes, subdirector del semanario El Temps.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_