El Cabanyal explicará su causa a la empresa de la Copa del América

La plataforma Salvem El Cabanyal se manifestó ayer en torno a tres cuestiones de actualidad para el futuro del barrio del distrito marítimo, amenazado por el proyecto del Ayuntamiento de Valencia de prolongar la avenida de Blasco Ibáñez: la inminente sentencia sobre el recurso contencioso-administrativo interpuesto contra el plan municipal, la reforma de la Ley de Patrimonio Cultural Valenciano y la designación de Valencia como sede de la Copa del América del año 2007.

Faustino Villora, portavoz de la plataforma, anunció que si la sentencia les es finalmente favorable, como esperan, ofrecerán su colaboración al Ayuntamiento para consensuar un plan de rehabilitación. Y anunció que en caso contrario seguirán luchando contra el proyecto como lo han hecho en los últimos cinco años. Entre las movilizaciones que pondrán en marcha en ese caso citó un desplazamiento a Suiza para explicar a la empresa responsable de la Copa del América el "desprecio" hacia el patrimonio por parte del Ayuntamiento que preside Rita Barberá. "Celebramos la concesión de la organización de la Copa del América", dijo Villora, "pero no aceptaremos un chantaje con ese motivo".

Sobre el cambio de la Ley de Patrimonio, el abogado de la plataforma, José Luis Ramos, dijo que es contraria a la ley estatal -que tiene prevalencia por su carácter de legislación básica- y que su finalidad es "eliminar las barreras que el patrimonio cultural supone para el urbanismo depredador". Pretende evitar, añadió el letrado, que los ciudadanos "puedan acudir a los tribunales y paralizar proyectos como en los casos del Benacantil en Alicante y El Cabanyal en Valencia".