Los alumnos demandan a los centros que aborden la violencia política en Euskadi

Los alumnos de Secundaria demandan a sus colegios e institutos más información y debate sobre la violencia política que sufre Euskadi. La pretensión de los estudiantes es disponer de un conocimiento más profundo y contrastar las diferentes opiniones y posturas sobre la situación. Esta es una de las conclusiones de la encuesta realizada por el Departamento de Educación en 140 centros de Secundaria para conocer las inquietudes de padres, profesores y alumnos en torno a la convivencia social en Euskadi y diseñar un programa que cubra las carencias detectadas.

En la encuesta participaron un total de 2.052 alumnos de 16 años, 566 profesores y 383 padres. Mientras la posición de los estudiantes es contundente al reclamar más información, las familias entienden que es "oportuno" que se trate el "conflicto vasco" -como lo denomina en su informe el Departamento de Educación- en los centros escolares, pero exigen que no se produzca "ninguna manipulación" de índole política. El profesorado, por su parte, demanda a la consejería "orientaciones claras" para abordar la cuestión con los alumnos.

La consejera de Educación, Anjeles Iztueta, hizo públicas estas conclusiones durante la presentación del programa Educar para la Paz, acto en el que también intervinieron los titulares de Justicia, Joseba Azkarraga, y Cultura, Miren Azkarate. Este plan, que contará con una financiación inferior al medio millón de euros y está impulsado por los tres departamentos del Gobierno, pretende hacer llegar en los próximos tres años a todos los centros e institutos de Euskadi iniciativas relacionadas con el fomento de la tolerancia, la pluralidad y la convivencia. Aunque algunos centros ya llevan a cabo actuaciones en este campo, el programa permitirá ordenar todas las acciones y poner en marcha otras nuevas.

A pesar de esa demanda de información por parte de la comunidad educativa, padres, profesores y alumnos contemplan el problema sobre todo desde un punto de vista humano más que político. Según indicó Iztueta, la mayoría de los encuestados reconocen que "el conflicto vasco" no afecta a la convivencia diaria de los centros, aunque a veces se producen situaciones de tensión. "Las experiencias más positivas", añadió la consejera de Educación, "son las que abordan los problemas de forma coordinada entre el profesorado, el alumnado y los padres".

Sobre la forma de orientar a los profesores para que expliquen a sus alumnos la situación, Iztueta resaltó que los diferentes agentes que componen la comunidad educativa reclaman diferentes niveles de información. "Evaluaremos lo que nos han pedido para ofrecer a los docentes pautas claras de actuación", garantizó.

Municipios implicados

El plan también cuenta con una línea de subvenciones a los ayuntamientos que fomenten iniciativas relacionadas con la cultura de la paz y la manera de resolver los conflictos de manera amistosa. Por el momento ya se han apuntado a esta iniciativa los municipios de Salvatierra, Amurrio, Llodio, Getxo, Barakaldo, Bermeo, Sopuerta, Zarautz, Sopelana y San Sebastián. Los grupos sociales que trabajan en el campo de la paz también contarán con ayudas económicas.

En las próximas semanas, Educación, Justicia y Cultura constituirán un grupo de expertos para que les asesoren en la definición del definitivo plan Educar para la Paz. Este grupo contará con representantes de asociaciones como Gernika Gogoratuz, Elkarri, Unesco Etxea o Gesto por la Paz. El Gobierno espera contar también con miembros de la Universidad.

Otra de las líneas del plan se centra en la elaboración de una guía didáctica y una batería de acciones formativas para los monitores de grupos de tiempo libre. Este tipo de asociaciones son agentes muy adecuados para la transmisión de valores como la tolerancia y la pluralidad, recalcó la consejera de Cultura.

Azkarraga aseguró que el conjunto de iniciativas del programa Educar para la Paz se enmarcan en un "objetivo político" de primera magnitud para el Gobierno: "sentar las bases de un futuro más armonioso, más humano y también más justo y solidario en la convivencia entre los vascos". Este objetivo exige la participación de las instituciones, la familia, los grupos de tiempo libre y los medios de comunicación, porque "sólo la conjunción de fuerzas permitirá avanzar hacia una convivencia en paz", indicó el consejero de Justicia.