Un acusado de arrojar a su esposa por el balcón dice que la mujer se suicidó
La Fiscalía afirma que la víctima sufrió malos tratos continuados
La Audiencia de Jaén acoge el juicio contra Manuel L. C, de 34 años, acusado de homicidio y malos tratos habituales a su esposa, Mercedes Cano, de 27 años, quien murió el 25 de agosto de 2001 tras caer desde el balcón de su casa en Andújar (Jaén). El acusado declaró ayer que la mujer se suicidó y reiteró que su relación con la fallecida era "ejemplar y maravillosa".
Los hechos acaecieron a primera hora de la tarde del 25 de agosto de 2001. Según el Ministerio Fiscal y la acusación particular, Manuel L. C., tras una fuerte discusión, agredió y golpeó a la mujer, quien se refugió en el dormitorio de ambos y cayó desde el balcón, situado en un segundo piso. La caída le produjo diversos traumatismos y hemorragias que le provocaron heridas graves. Tras ser trasladada al hospital Reina Sofía de Córdoba, falleció a las pocas horas por la magnitud de las lesiones.
Tanto la Fiscalía como el abogado de la familia de la fallecida, Miguel Ángel Palacios, afirmaron que se produjeron continuas vejaciones y maltratos psicológicos y físicos durante los cinco años que duró el matrimonio, a pesar de que la mujer nunca los denunciase públicamente.
El marido de la víctima, que fue detenido días después del suceso por la policía, fue puesto en libertad bajo fianza en diciembre de 2001. La Fiscalía pide para él 13 años y seis meses de prisión y 150.000 euros de indemnización para los padres de la fallecida. Por su parte, la acusación particular eleva la pena a 15 años de prisión con los agravantes de parentesco y abuso de superioridad y 300.000 euros de indemnización.
La Fiscalía recordó cómo Manuel L. C. obligaba a Mercedes Cano a asumir públicamente su esterilidad, cuando, según los exámenes médicos, el único que no podía concebir hijos era el propio acusado. El abogado de la familia también describió continuos episodios en los que la víctima sufrió agresiones físicas y comentarios denigrantes por parte del acusado, que fueron respaldados por vecinos de la pareja que declararon que eran continuos los gritos y peleas en casa de la fallecida.
Por su parte, el abogado de la defensa pidió la libre absolución del acusado y defendió la tesis del suicidio. Según el letrado, Mercedes Cano saltó voluntariamente desde el balcón de casa, "por la depresión constante en la que se encontraba sumida la fallecida".
Para el abogado defensor, las numerosas patologías que sufría la víctima, como artrosis y algunas disfunciones cerebrales que le provocaban vértigos y pérdida de conocimiento, a lo que habría que sumar sus problemas laborales y la frustración de la pareja por no poder tener hijos, fueron los únicos motivos que provocaron que la fallecida decidiera arrojarse voluntariamente al vacío.
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