La fiscalía pide 18 años de cárcel para un policía de Málaga por asesinato

La fiscalía de Málaga pide en sus conclusiones provisionales una condena de 18 años de prisión para un agente del Cuerpo Nacional de Policía que, fuera de servicio, causó la muerte de un joven de un disparo con su arma reglamentaria durante una riña en un bar motivada por el uso de una máquina tragaperras. El agente, F.J.A.G., está acusado de un delito de asesinato. Los hechos ocurrieron en la madrugada del pasado 22 de febrero en el bar Libra, un establecimiento de la calle Albacete de la capital, donde el agente se encontraba tomando una consumición.

Según el fiscal, al local accedieron unos jóvenes y uno de ellos se dirigió a una máquina tragaperras que había en el interior, echando una moneda. Como en esos momentos había otra persona jugando, que se había dirigido a la barra para cambiar dinero, se entabló una discusión que acabó a golpes. El agente se aproximó para mediar y uno de los jóvenes le propinó un puñetazo.

El fiscal asegura que el policía "de repente y de forma sorpresiva" sacó su arma reglamentaria -que portaba a pesar de encontrarse de baja temporal- y apuntó al pecho de la víctima, Antonio Bautista Martínez, al que disparó, a unos 80 centímetros de distancia, causándole la muerte casi instantánea. Al encontrarse de frente a la víctima y a esa corta distancia, el proyectil penetró por el pecho de la víctima y describió una trayectoria de arriba hacia abajo.

El agente utilizó su arma reglamentaria, que, según el relato de la fiscalía, estaba "en perfecto estado de funcionamiento y conservación" y que la montó "sobre la marcha".

La fiscalía pide también que el acusado indemnice a los familiares de la víctima con 360.000 euros y solicita que se incorporen al sumario para la celebración de del juicio ocho pruebas adicionales, al margen de los testimonios de las personas que se encontraban en el bar en ese momento.

El fiscal pone de relieve que el policía acusado se encontraba en "plena facultades mentales" la noche del incidente, y ha solicitado un informe de las facultades psicofísicas y un reconocimiento del agente.

Además, el fiscal ha pedido las diligencias con la primera inspección ocular y el reportaje fotográfico realizado por los agentes que acudieron al establecimiento, así como una ampliación de los informes médicos forenses y de las pruebas de balísticas para determinar la distancia del disparo y un diagnóstico diferencial de los orificios de entrada y salida de las balas. También se ha solicitado un informe toxicológico de la víctima.