Rusia endurece el control de sus empresarios
Pésimas noticias para los hombres de negocios rusos: la Duma estatal aprobó ayer modificaciones al Código Penal que convierten prácticamente a todo empresario -y también a millones de profesionales y empleados- en potenciales reos. De ahora en adelante, si un ruso no ha pagado parte de sus impuestos, ya no podrá, como antes, arrepentirse y cancelar lo que debe más una multa para evitar la cárcel: de todas formas será sentenciado a prisión.
Si se tiene en cuenta que el 90% de las empresas rusas cometen irregularidades, según explicó el diputado Borís Nadezhdin, cualquier hombre de negocios se convierte ahora en rehén de la fiscalía -o del Kremlin-, ya que en un momento se podrá abrir una causa en su contra y encarcelarlo.
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