_
_
_
_
Entrevista:JOSEP ANTONI DURAN LLEIDA | Secretario general de CiU | EL FUTURO POLÍTICO DE CATALUÑA

"Las negociaciones serán primero con Esquerra; otra cosa es que fructifiquen"

Jordi Pujol afirmó en la noche electoral que Josep Antoni Duran Lleida ha sido decisivo para la victoria de Convergència i Unió (CiU). Como tal, se encargará junto con Artur Mas de buscar un socio político con el que formar una mayoría estable de gobierno.

Pregunta. Teniendo en cuenta los resultados, ¿qué negociaciones parecen más factibles?

Respuesta. No depende de CiU, sino del resto de formaciones políticas porque son las que tienen que decidir si quieren o no pactar con CiU. Estas elecciones han evidenciado una clara voluntad del electorado de dar una mayoría nacionalista. Y ya veremos si de ello se desprende un posible gobierno de coalición o acuerdos concretos de legislatura. La otra posibilidad, un gobierno de izquierdas entre socialistas, Esquerra e Iniciativa, no la veo como consecuencia de las urnas ni como mejor solución para el país.

"A los empresarios les diría que pueden confiar en CiU, sea cual sea la fórmula de gobierno"
Más información
Zapatero apoya a Maragall para que negocie un Gobierno de progreso con ERC e ICV
Ibarra amenaza con no acudir al comité del PSOE porque está "cansado de la política madrileña"

P. Pero hay dos mayorías: una nacionalista de 69 diputados y otra de izquierdas, de 74.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

R. Por supuesto. Pueden constituirse otras mayorías aparte de CiU y Esquerra. Por ejemplo, socialistas, ERC e Iniciativa. Pero también existen otras combinaciones. Nadie entendería que el futuro Gobierno de Cataluña se edificase en torno a una persona que ha perdido las elecciones y que ha tenido un contundente fracaso como Pasqual Maragall. Es una posibilidad que se ha dado en otras comunidades, pero en Cataluña la normalidad y la estabilidad política siempre se ha resuelto a partir de la formación con más diputados. Los socialistas y el señor Maragall sabrán lo que deben hacer. Al Gore tuvo más votos pero menos escaños, reconoció la derrota y se retiró, y George Bush formó gobierno. En este caso, Mas ha ganado y tiene que formar gobierno.

P. Queda claro que su prioridad es Esquerra Republicana.

R. Sería absurdo que pensáramos en un gobierno de coalición sin tener en cuenta primero a ERC, porque nos engañaríamos a nosotros mismos y al electorado. Las conversaciones irán en esta dirección. Otra cosa es que fructifiquen. Cualquier acuerdo pasa porque la federación continúe siendo lo que ha sido en estos últimos años. Y no podemos desvirtuar el gran capital político de CiU: el nuevo Estatuto, un determinado encaje y concepto de Cataluña en el Estado -y ningún pacto puede arrastrarnos a lo contrario- y nuestro propio modelo de sociedad. Veremos si con ERC se hacen compatibles estos objetivos y estos modelos. Por supuesto que CiU es una fuerza nacionalista, pero también tiene su propio modelo de sociedad.

P. Un frente nacionalista CiU-ERC sería visto con recelo en el resto de España. Ustedes han subrayado que no renunciarán a negociar con el Gobierno central.

R. Y continuaremos negociando con Madrid para defender los intereses de Cataluña. Quien aspire a presidir la Generalitat y afirme que no quiere negociar con Madrid, o está engañando a su electorado o no sabe lo que tiene entre manos. Ya veo que hay un gran alboroto en la política española. Es una exageración. Pido que se reflexione seria y serenamente. El resultado electoral es consecuencia de la actitud del Partido Popular. Según ellos, en el País Vasco se equivocaron los electores. Ahora se ha equivocado CiU. Pero tras ocho años de Gobierno de Aznar hay un País Vasco y una Cataluña más radicalizados. ¿De verdad no tienen nada que ver ellos? En cualquier caso, en Cataluña hay una fuerza política central, que es CiU, que continúa reivindicando su centralidad. Y la garantizará en el futuro del Estado.

P. Existe un cierto temor a que un pacto entre CiU y ERC pueda provocar una fractura social entre nacionalistas y no nacionalistas.

R. Donde esté CiU no habrá fractura social, sino garantía de cohesión. Pero al margen de los resultados electorales y de si Esquerra estará o no en el Gobierno, nuestra relación con la política española no puede continuar como antes. Eso sí cambiará, pero desde una actitud constructiva y positiva. Defender los intereses de Cataluña no está reñido con nuestro compromiso con el conjunto del Estado. Pero el Estado también tiene que pensar en nosotros.

P. Los sectores empresariales apuestan por un Gobierno PSC-CiU.

R. Yo les diría a los empresarios que pueden confiar inequívocamente en Convergència i Unió, sea cual sea finalmente la fórmula de gobierno. Agradezco estas reflexiones, pero seguro que estimarán correctas nuestras decisiones. Que lo dejen en nuestras manos.

Josep Antoni Duran Lleida, ayer en su despacho en Unió.
Josep Antoni Duran Lleida, ayer en su despacho en Unió.MARCEL.LÍ SÀENZ

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_