Rajoy advierte de que el voto a los socialistas catalanes será gestionado por un partido independentista
Cuando faltan sólo tres días para el final de la campaña catalana, Mariano Rajoy acudió ayer de nuevo a Barcelona para dar un empujón a su candidato, Josep Piqué, y sobre todo a azuzar el voto del miedo a Esquerra Republicana (ERC). El secretario general del PP pidió a todos los presentes en su mitin que convencieran a los votantes socialistas de que su papeleta "la va a gestionar un partido independentista" como ERC. Piqué recordó que también los que voten a CiU apoyarán indirectamente a ERC. Ambos demostraron la preocupación del PP por la posibilidad de que el voto útil en unas elecciones muy disputadas empeore sus expectativas.
Rajoy, que estaba en Barcelona por segunda vez en 48 horas, se dirigió en tono muy mitinero a todos los presentes, unas 500 personas reunidas en un centro cívico del popular barrio de Sant Andreu, en Barcelona, para explicarles por qué no se debería votar a los socialistas, competidor directo del PP en esta capa fundamental de la población catalana. Después de recordar que en una entrevista el líder del ERC, Josep Lluís Carod, había apostado de nuevo por la independencia como proyecto político, comentó: "Debe ser muy difícil para un votante del PSC de toda la vida votar a Maragall y saber que ese voto lo va a gestionar un partido independentista".
El PP ha detectado en los últimos días el que temía podía ser su mayor peligro en las elecciones: el voto útil. Ninguna encuesta ofrece la posibilidad de que este partido entre en el próximo Gobierno catalán, lo que podría ahuyentar a sus posibles electores. Por eso, sus dirigentes se han lanzado a recordar que ERC tendrá una fuerte presencia tanto si gobierna CiU como si es el PSC quien controla la Generalitat.
Rajoy entró luego a descalificar directamente a Pasqual Maragall, el candidato socialista, con la ironía habitual del líder del PP: "Es preocupante. En los últimos días de campaña Maragall hace lo mismo que Rafael Simancas. Ahora ofrecen viviendas a tres duros. Si la campaña dura una semana más y Maragall cumple lo que promete, todos los que están aquí serán ricos. Hay que ser serio, hombre, y regalar billetes no lo es".
Rajoy repitió la tesis oficial sobre la reforma del Estatuto que proponen todos los partidos menos el PP: "No creo que a la gente le preocupe. No es una necesidad". En esta idea insistió varias veces durante su discurso. Pero además recurrió a la historia democrática: "Eso de Libertad, Amnistía y Estatuto de autonomía (consigna de muchas manifestaciones antifranquistas) ya no es una aspiración de nadie. Ahora lo que hay que demostrar es cómo se gestiona. No se trata de culpar a los demás de la ineficacia. No hay que imaginar problemas nuevos, sino soluciones imaginativas. Un dirigente político no está para inventar problemas". Rajoy dijo que Piqué había demostrado que no es necesario ser nacionalistas para querer mucho a Cataluña. Y repitió el lema de campaña: "Él cree en Cataluña". "Y en España", le corrigió una señora con un grito. "Efectivamente, no son incompatibles", respondió rápido.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.