El príncipe Carlos baraja aparecer en televisión para defenderse

El diario escocés The Sunday Herald publicó ayer detalles de las acusaciones vertidas por un antiguo sirviente contra Carlos de Inglaterra, del que asegura que participó en "un incidente sexual" con otro sirviente. La prensa escocesa no está afectada por la orden judicial que prohíbe publicar esos detalles en Inglaterra y Gales. En Londres, el tabloide News of The World revelaba ayer que el secretario privado del príncipe, sir Michael Peat, preguntó hace meses a su antecesor si creía que Carlos de Inglaterra era bisexual.

La prensa de Inglaterra y Gales no puede detallar la naturaleza de esas acusaciones, a las que se refieren como "un incidente aparentemente de contenido sexual". Tampoco pueden decir quiénes son los implicados, aunque Carlos de Inglaterra ya ha reconocido que él es el "alto personaje de la familia real" al que se refiere George Smith, de 43 años, el antiguo paje del príncipe y veterano en las Malvinas que ha lanzado todos los rumores, negados tajantemente por Clarence House, la casa del príncipe. Y se sabe también que el que fuera criado de máxima confianza de Carlos, Michael Fawcett, es quien ha recurrido a la justicia para impedir que el Mail on Sunday explique con detalle lo que Smith dice que vio en palacio años atrás.

Mientras el heredero de la corona inglesa regresaba ayer al Reino Unido tras cuatro días de viaje oficial por Oriente Próximo, la familia real parece haber cerrado filas en torno al heredero y estudia la manera de atajar una oleada de rumores que crece día a día y que ayer ocupaba las primeras páginas de la prensa londinense con los enfoques más variados. Mientras The Sunday Times aseguraba que el príncipe Guillermo cree que todo esto es un complot para impedir que su padre herede la corona, el Sunday Telegraph aseguraba que Carlos ha dado instrucciones a sus abogados para que estudien la posibilidad de llevar a los tribunales a Smith. La reina Isabel le ha dado todo su apoyo, al igual que sus hijos Guillermo y Enrique. Guillermo, segundo en la línea de sucesión, teme que las acusaciones afecten a su padre como el acoso de parte de la prensa afectó a su madre, Diana.

Según The Sunday Times, la casa del príncipe de Gales ha contactado con el ex primer ministro conservador John Major y otras personalidades para que defiendan la reputación del heredero, y se plantean la posibilidad de que Carlos se dirija a la nación en un discurso televisado.

El comunicado publicado la semana pasada por sir Michael Peat no sólo no acabó con los rumores, sino que creó una enorme expectación entre los medios acerca de la naturaleza de las acusaciones lanzadas.

El secretario privado del heredero hizo pública una nota rechazando tajantemente las acusaciones contra su patrón, pero sin especificar cuáles son. "Basta con conocer a Carlos para saber que son falsas", dijo entonces. Pero ayer se supo que, ante la avalancha de rumores que desde hace meses circulan por palacio, él mismo consideró necesario realizar algunas consultas.

Hace unos meses, Peat telefoneó al ex relaciones públicas del príncipe Michael Bollan para salir de dudas. "¿Es Carlos bisexual?", le preguntó. Bollan explicaba ayer en el News of The World que se quedó "atónito" ante la pregunta. "Le dije categóricamente que el príncipe no es ni gay ni bisexual", asegura.