Dos detenidos en Málaga acusados de descuartizar a un hombre

Apenas 24 horas después de que un chatarrero encontrara en un contenedor de basura de Málaga las piernas de un hombre, la policía ha detenido a los presuntos autores del crimen. Alejandro R. M., de 44 años, y María José M. F., de 28, fueron detenidos la noche del viernes acusados de un asesinato que se produjo en el domicilio de la sospechosa, según deduce la policía tras inspeccionar la vivienda.

La comisaría provincial de Málaga informó ayer de la detención, pero no aportó datos sobre el móvil del crimen que, en un principio, atribuyó a un ajuste de cuentas por tráfico de drogas, aunque otras fuentes han apuntado, sin embargo, que el suceso pudo empezar como un intento de robo.

En un comunicado oficial difundido ayer por la comisaría provincial de Málaga, simplemente se informa de que los investigadores "trabajan para establecer el móvil del asesinato y las circunstancias por las que los detenidos se relacionaron con la víctima". La policía no ha informado tampoco de la causa de la muerte ni de cómo se produjo el asesinato, a la espera de tener los informes forenses definitivos del Instituto de Medicina Legal de Málaga.

Los indicios que baraja la investigación apuntan a que los presuntos asesinos descuartizaron a su víctima después de matarla con el propósito de deshacerse del cadáver con más facilidad arrojándolo a la basura. Tampoco se ha determinado de momento la identidad de la víctima, y sólo ha trascendido que se trata de un hombre de raza blanca, de unos 50 años, de pelo castaño oscuro y que cuando fue asesinado vestía pantalones negros y camisa de cuadritos azul y roja.

Antecedentes delictivos

Los dos detenidos tienen antecedentes delictivos, especialmente el hombre, residente en el conflictivo barrio de La Palmilla, y que cuenta en su historial policial con 11 arrestos anteriores por presuntos delitos de lesiones y amenazas y robos con fuerza y con violencia. La mujer fue detenida en una ocasión anterior por un asunto de robo con fuerza.

La mujer reside en una vivienda próxima a la calle de Ruiz Jiménez, en la barriada de Nueva Málaga, en la que estaba el contenedor en el que un chatarrero encontró la noche del jueves las piernas del cadáver cuando rebuscaba entre la basura. En principio se informó de que estos miembros pertenecían al cuerpo de una mujer porque tenía depiladas las piernas.

La policía acordonó la zona y retiró 18 contenedores de la barriada, cuyo contenido fue trasladado aislado en un camión de la empresa municipal de limpieza urbana para buscar las demás partes del cuerpo. Finalmente, en la mañana del viernes fueron encontrados el tronco y la cabeza del cadáver, unidos, en el interior de una maleta arrojada a uno de esos contenedores.

Se trata del segundo cadáver descuartizado en la provincia de Málaga en apenas un mes. En octubre fueron descubiertos los restos de parte del cuerpo de un hombre asesinado en Marbella en la planta comarcal de tratamiento de residuos de Casares, hasta donde llegaron en uno de los camiones del servicio de recogida.