_
_
_
_
Crítica:POP | Blur
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

El camino perdido

Blur logró en su segundo concierto en España -el primero fue en Barcelona- una más que aceptable entrada de público, pero no rebosó el aforo. Asimismo, su planteamiento escénico les llevó a hacerse acompañar de tres coristas, cuya labor fue espléndida, un percusionista y un guitarrista de apoyo que, la verdad, no hizo en ningún momento recordar la ausencia del fugado Graham Coxon.

La banda atacó un repertorio extenso en el que sabiamente fueron combinando las mejores piezas de sus siete cedés, dando especial relevancia a las de Think tank, una colección de canciones que hace derivar a la banda de Damon Albarn hacia terrenos más frívolamente étnicos y, desde luego, electrónicos. Sin embargo, para recordar los tiempos gloriosos de Parklife, su obra maestra, Blur acudió casi desde el principio a temas como Girls & Boys y Badhead, dos espléndidas canciones que les emparentan con Bowie y los Kinks. Para más adelante dejarían To the End y End of The Century, que irían combinando con las piezas que más efecto causaron entre los espectadores: Tender o la ruidosa Song 2, con la que el público siempre se pone a dar saltos como en una orgía grunge.

En cuanto a los temas nuevos, hay mucha y muy buena melodía en canciones como Out of Time, Caravan, Brothers and Sisters u On the Way to The Club, uno de los números fuertes del extenso bis que ofrecieron al final. Pero quizá el despiste -o la desorientación estética- que el grupo ha atravesado en las últimas épocas les reste a sus propias composiciones algo del efecto necesario para hacerlas pasar de temas normales y corrientes a canciones de éxito. No siendo un mal concierto, la verdad es que sonó todo con cierta indolencia y menos brillantez que en anteriores visitas a la capital. Ojalá encuentren de nuevo el camino perdido que lleva a Parklife.

Damon Albarn, durante una actuación de Blur el pasado verano en Benicàssim.

/ SANTIAGO CARREGUÍ
Damon Albarn, durante una actuación de Blur el pasado verano en Benicàssim. / SANTIAGO CARREGUÍ
Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_