El PSOE dice que harán falta 10 años para lograr la eficacia policial del 96
Los socialistas responsabilizan a Rajoy del "deterioro" de la seguridad ciudadana
El PSOE denunció ayer que serán necesarios diez años para recuperar la capacidad operativa que tenían en 1996 las Fuerzas de Seguridad del Estado, que han perdido 10.000 agentes desde que gobierna el Partido Popular. Los dirigentes socialistas José Blanco y Juan Fernando López Aguilar responsabilizaron al candidato del PP a La Moncloa, Mariano Rajoy, de "imprevisión" y del "deterioro" de la operatividad de la Guardia Civil y Polícia Nacional en el marco de una campaña de denuncia de la inseguridad ciudadana.
Rajoy fue vicepresidente primero desde las elecciones de marzo de 2000 hasta que el pasado 2 de septiembre fue designado candidato a la Presdiencia del Gobierno y ocupó además la cartera de Interior de 2001 a 2002.
López Aguilar precisó que, desde que gobierna el Partido Popular, el presupuesto dedicado a las Fuerzas de Seguridad del Estado ha ido descendiendo hasta un 0,53% del Producto Interior Bruto este año; mientras que en 1996, último año de gobierno del PSOE, era de un 0,93%.
Las consecuencias de esta política son, según el responsable socialista, el "aumento espectacular" de la seguridad privada, la descoordinación entre los distintos cuerpos de seguridad, también la lucha antiterrorista, y la "desmotivación" policial.
López Aguilar ilustró el "deterioro" de la seguridad ciudadana con un dato "crucial": España, con un 30%, es uno de los tres países de la Unión Europea dónde más ha crecido la criminalidad en los últimos ocho años, desde que gobierna el PP. Precisó que los delitos contra las mujeres han crecido un 29% y un 30%, la delincuencia juvenil; mientras que se han cometido 1.500 homicidios por año.
A juicio de López Aguilar, será necesario mantener un esfuerzo inversor, por lo menos hasta el año 2.009, solamente para tener los 51.000 efectivos policiales existentes en 1996. No obstante, aclaró que será necesario superar ese nivel de inversión porque "el crecimiento de los delitos, de la tasa de criminalidad y las mafías extranjeras lo requieren".
"Si no se hace frente a esta situación, España se convertirá en los próximos años en un territorio muy inseguro y se deteriorará la calidad democrática y repercutirá en el turismo", concluyó.
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