Las figuras del 'hip-hop' dedican un disco a la película 'Scarface'

Def Jam Recordings presents music inspired by Scarface reúne una colección de temas de rap que se refieren a la película Scarface, de Brian de Palma, que se ha convertido en un título mítico en el mundo del hip-hop. Brian de Palma siempre se queja de que su estridente arte sólo es apreciado por los críticos europeos, especialmente franceses; seguramente, De Palma no esperaba reconocimientos como Def Jam Recordings presents music inspired by Scarface. Estrenada hace veinte años, oficialmente era un remake de una película de gánsteres de 1932, dirigida por Howard Hawks. Pero el astuto guionista, Oliver Stone, trasladó la acción al Miami de la cocaína.

Tony Montana, el personaje que encarnaba Al Pacino, era un marielito -uno de aquellos desesperados que escaparon del castrismo por el puerto cubano de Mariel- que subió velozmente en un Miami inundado de polvo blanco. En 170 minutos, Brian de Palma narra su sangrienta ascensión y su brutal caída.

Russell Simmons, fundador del sello Def Jam, explica que la película es una fábula moral: "Es la otra cara del sueño americano. Hay muchos Tony Montana en cualquier barrio afroamericano, y la película recuerda que, por muy rentable que parezca su actividad, el final siempre es trágico". No es exactamente el mensaje que transmiten algunos temas del disco, donde se samplean fragmentos de la banda sonora y se insertan famosas frases escritas por Oliver Stone: "Nunca te coloques con tu propio producto".

Simmons, que reconoce que en sus años jóvenes vendió cocaína falsa a panolis, dice que el disco oscila entre los retratos del menudeo de drogas sin valoraciones morales -los temas de Notorious BIG, Jay-Z, NWA o Ice Cube- y los avisos sobre los peligros del consumo desmedido, como el clásico White lines (don't do it), de Grandmaster Flash. Simmons es ahora uno de los líderes de la comunidad negra de Nueva York y dedica buena parte de sus energías a la reforma de las draconianas leyes antidroga de aquel Estado: "Se penalizó especialmente el crack, que era la droga del gueto, en comparación con el tratamiento de la cocaína en polvo".