Entre el cielo y el mar

Como la Torre Eiffel, en París; la de San Sebastián, en Barcelona, y la Torre Gálata, en Estambul, Barcelona puede tener otros dos restaurantes de altura, uno en la torre Jaume I, en el puerto, y otro en la montaña de Montjuïc, ambos al pie de la línea por la que discurre el teleférico.

El grupo Tragaluz mantiene negociaciones avanzadas con la empresa Teleféricos de Barcelona para instalar un restaurante en la torre Jaume I, a unos 40 metros de altura, según han confirmado las dos compañías. A su vez, Teleféricos de Barcelona ha tenido contactos con el grupo hotelero Stein para reabrir el antiguo restaurante L'Ast, situado al inicio del teleférico, en la ladera de Montjuïc, han indicado fuentes de ambas sociedades. El restaurante se encuentra cerrado desde hace varios años.

Barcelona puede tener un restaurante en la torre Jaume I y otro en la montaña de Montjuïc

La línea del teleférico discurre por el puerto entre la Barceloneta y la montaña de Montjuïc, a lo largo de 1,2 kilómetros. Fue ideada para la Exposición Universal de 1929 a fin de enlazar el estadio olímpico de Montjuïc y la Fira de Barcelona con el puerto, pero la obra sufrió retrasos y no empezó hasta 1931. La línea ya alberga desde hace dos años un restaurante situado al otro extremo del teleférico en lo alto de la torre de San Sebastián, en la Barceloneta, que está regentado por el empresario Óscar Manresa. Ahora la instalación de dos nuevos restaurantes modificaría el sky line nocturno de la zona del puerto.

La torre Jaume I tiene 107 metros y está ubicada frente al World Trade Center. El proyecto del grupo Tragaluz para instalar en ella un restaurante prevé ubicarlo en el primer recinto octogonal de la torre y requerirá una inversión que será realizada básicamente por el grupo de hostelería, explican las fuentes consultadas. Las torres fueron renovadas hace tres años, lo cual supuso una inversión de cuatro millones de euros, con el fin de reforzar sus estructuras, explica Jaime Merino, consejero delegado de Teleféricos de Barcelona, empresa que tiene una concesión del Gobierno catalán para explotar la línea de transporte. El grupo Tragaluz pedirá permisos al Ayuntamiento y al Puerto de Barcelona para poder realizar la obra.

En el caso del restaurante de la montaña de Montjuïc, donde empieza el teleférico, las negociaciones son preliminares. El dueño del local es el Ayuntamiento, que se declara "encantado" de que algún grupo instale allí una "oferta de calidad", ha señalado un portavoz municipal. El Ayuntamiento tiene otorgada la concesión del local a Teleféricos de Barcelona, que tenía un inquilino que al jubilarse dejó el local vacío. El grupo Stein, que se ha interesado por el restaurante, está construyendo un hotel de lujo a pocos metros, en los antiguos estudios de Televisión Española. La empresa hotelera dice que prevé tener listo el hotel en el primer trimestre de 2005, aunque indica que sobre el restaurante no hay ninguna decisión tomada.

Tragaluz es un grupo familiar, presidido por Rosa Maria Esteva, que ha tenido un crecimiento espectacular en los últimos años. Tiene nueve restaurantes en Barcelona y uno en Calella de Palafrugell (Baix Empordà) y ha decidido desembarcar en el sector hotelero. Antes de final de año abrirá un hotel de cuatro estrellas en el Eixample de Barcelona. El grupo Stein es propiedad del empresario norteamericano David Stein, que ha hecho una apuesta por los hoteles de lujo en Barcelona. Además de construir el hotel Miramar, Stein acaba de reabrir el hotel La Florida, en la ladera del Tibidabo, donde ha instalado un establecimiento de lujo tras una fuerte inversión.