Una berlina media muy dinámica y segura
Comodidad para viajar, un interior bien resuelto y una atención prioritaria a la seguridad. Éstos son los grandes valores de la segunda generación del Volvo S40, el modelo más pequeño de la marca sueca. Llegará a España en febrero de 2004, pero a partir de noviembre se admitirán pedidos en los concesionarios.
El nuevo Volvo S40 va dirigido a las familias jóvenes y está previsto fabricar 70.000 unidades anuales (40.000 irán al mercado estadounidense y 3.000 para el español). Todavía no hay precios oficiales, pero la versión básica (1.6 de gasolina) costará unos 20.000 euros, y la más potente (2.5 turbo) subirá a 36.000 euros. Los turbodiésel variarán entre 23.000 y 25.000 euros, según el acabado.
Al igual que sus hermanos mayores, el nuevo Volvo destaca por su equipo de seguridad. Así, todos los S40 vienen con seis airbags, ABS, control de tracción, el sistema SIPS de protección contra impactos laterales, reposacabezas activos y el dispositivo IDIS de información al conductor. Pero sorprendentemente la marca sueca sigue sin incluir de serie en toda la gama el control de estabilidad ESP.
Medidas más compactas
El Volvo S40 2004 mide 4,47 metros de largo y es cinco centímetros más corto que su antecesor. En cambio es cinco centímetros más ancho (1,77) y cuatro más bajo (1,45). Estas medidas aportan una estética más estilizada y refuerzan su dinamismo. Y el resultado es una línea compacta y con estilo que rompe con el aspecto más clásico del modelo anterior. Destaca la nueva parrilla frontal, que define la nueva identidad de la marca y es muy parecida a la del S60, aunque con un frontal más redondo. Y la zaga recortada provoca una imagen muy original.
El interior es luminoso y aporta un ambiente moderno y elegante, con una consola innovadora y unos acabados cuidados y atractivos. Los asientos son confortables y los respaldos de las plazas traseras se pueden abatir al completo y dejan el piso plano para ampliar la capacidad de carga. Sin embargo, la altura interior y el espacio para las piernas de los pasajeros de atrás resultan justos. Y el maletero tampoco sorprende por su amplitud (404 litros).
Una gama mecánica completa
El S40 contará de entrada con tres motores de gasolina: 2.4 de cinco cilindros (140 y 170 CV) y 2.5 turbo (220 CV). Y con un 2.0 turbodiésel de cuatro cilindros y 136 CV. Los dos primeros se venden con cambio manual y automático de cinco marchas, y el turbo se ofrece con el automático y con un manual de seis velocidades, este último también disponible en el turbodiésel. La oferta mecánica se ampliará en abril con un propulsor 1.8 de gasolina con 120 CV y con el 2.5 turbo con tracción 4×4. Y en otoño llegarán los motores menos potentes de la gama: 1.6 de gasolina (100 CV) y 1.6 turbodiésel (110 CV).
La gama incluirá dos equipamientos: Level 2 (básico) y Level 3. Aparte del equipo de seguridad, el primero viene con aire acondicionado, elevalunas eléctricos, radio-CD... Y el Level 3 añade control dinámico de estabilidad (DSTC), asientos calefactados, tapicería de cuero, faros de xenón...
DISEÑO MINIMALISTA
EN EL INTERIOR DEL S40 2004 destaca el diseño de la consola central, que consta de una sola pieza independiente y con muy poco espesor. Sirve de unión entre el salpicadero y la zona del cambio, pero deja un hueco libre por detrás que sirve para guardar objetos. Ya se había presentado en el coche-concepto VCC, y está inspirado en los diseños de mobiliario de Arne Jacobsen y en las líneas funcionales de la arquitectura de Alvar Aalto.
La distribución de los mandos también es innovadora: se agrupan en dos alturas según su función. Los de la mitad superior dan acceso a los sistemas de audio y el teléfono integrado, y los de la zona inferior, al climatizador. La consola integra también el sistema IDIS, que viene de serie. Este nuevo dispositivo de información incluye avisos sobre el estado del vehículo y actúa de forma inteligente: decide si pasa o retrasa la entrada de las llamadas de teléfono o los mensajes en función del tráfico, la velocidad, el giro del volante, etcétera.
SEGURIDAD PARA OCUPANTES Y PEATONES
LA ESTRUCTURA de la carrocería del nuevo S40 es un 68% más rígida que la de su predecesor. Además, el frontal está estudiado para que en caso de colisión absorba la mayor parte de la fuerza del impacto. Además, si se produce una deformación importante, evita que los órganos mecánicos (motor, cambio...) penetren en el interior.
Para ofrecer la máxima seguridad, los ingenieros de Volvo han utilizado tres aceros de calidades diferentes que se distribuyen por la carrocería según se necesite más dureza o más capacidad de absorción o deformación. En la zona afectada por los choques frontales, el acero es ultrarresistente, pero también deformable (color rojo en la imagen superior). En las áreas próximas al habitáculo se utiliza acero de dureza extra, pero menos deformable (color azul). Y el conjunto se completa con unas barras de acero de alta resistencia en los laterales (color amarillo), para que la deformación en los impactos sea mínima. Además, las medidas más compactas de los motores han permitido alejar la mecánica del habitáculo, y los sistemas de deformación provocan que se desplace 15 centímetros hacia abajo en caso de colisión para evitar que impacte a los ocupantes.
Los diseñadores han tenido también en cuenta la nueva normativa europea sobre protección a los peatones. Así, para reducir los daños en caso de atropello, se han redondeado los ángulos del frontal, y tanto el parachoques como el capó delantero incluyen zonas de amortiguación.
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