Llegar a fin de mes

Es un consuelo aunque sea de tontos, conocer el dato de que el 56% de las familias españolas no llegan a final de mes. Consuelo porque una acaba por creer que es una incompetente en la administración del presupuesto familiar, o que se equivoca en la ordenación de prioridades, o que se ha convertido en una consumidora compulsiva de bienes inútiles iniciando así el camino del endeudamiento y la quiebra económica familiar. Pues no. Si más de la mitad de las familias de este país se ven obligadas a estirar penosamente sus ingresos sin conseguir cubrir el gasto mensual quiere decir que más allá de errores individuales, el sistema no funciona bien o por lo menos que no tiene en cuenta los intereses de la mayoría de la población. Un dato añadido cono el de que los tomates y otras verduras han subido un 50% en lo que va de año, avala la conclusión de que la que yerra no eres tú, que manejas los mismos fondos que desde luego no se han incrementado en la misma medida, sino que el fallo está a otros niveles e instancias que permiten subidas abusivas e injustificadas de bienes de primera necesidad. Y ante esa dinámica no hay contable que triunfe, ni presupuesto que se resista. Las consecuencias son el empobrecimiento paulatino, el aumento del endeudamiento, la reducción forzosa del consumo, y la perplejidad ante el famoso lema de "España va bien". En todo caso irá bien para algunos.