La Junta paraliza la instalación eléctrica de la térmica de Abengoa en Arcos

La Consejería de Medio Ambiente ha iniciado un expediente sancionador contra Iberdrola Ingeniería y Consultoría S.A. por la instalación de una línea eléctrica de alta tensión, de 20 kilowatios, para la central térmica de ciclo combinado que construye en Arcos de la Frontera (Cádiz) que carece del preceptivo trámite del informe de impacto ambiental y ha ordenado la paralización de la instalación.

La empresa se enfrenta ahora a una sanción económica que podría ascender a 6.000 euros, aunque tiene un plazo de quince días para presentar las alegaciones, documentos o informes que crea oportuno al expediente administrativo iniciado por la Junta.

La Administración andaluza señala que los hechos por los que ha paralizado la instalación eléctrica están tipificados como graves, según el artículo 80 de la Ley de Protección Ambiental. La plataforma contra las térmicas de Arcos, que está integrada por diferentes colectivos ecologistas y ciudadanos, saludó ayer la decisión adoptada por la Consejería de Medio Ambiente.

Iberdrola construye esta central de 1.600 megavatios de energía en las orillas del embalse de Guadalcacín. La compañía eléctrica absorbió los dos proyectos de 1.200 y 400 megavatios que con anterioridad había promovido en el mismo enclave la multinacional norteamericana Enron, ahora en situación de quiebra, y la empresa Guadalcacín Energía, respectivamente.

Al hacerse cargo de ambas iniciativas, Iberdrola ha unificado las dos plantas en una sola central de mayor capacidad con el objetivo de entrar en el mercado energético de Andalucía, como explicó hace unas semanas el presidente de esta compañía, Iñigo de Oriol.

El varapalo que ha recibido ahora la firma energética podría echar al traste sus planes para inaugurar la central de ciclo combinado de Arcos de la Frontera a mediados de 2004.

La portavoz de la Plataforma No a las térmicas, Julia Franco, que había pedido en reiteradas ocasiones la paralización de las obras, mostró ayer su satisfacción por la decisión de la Junta. "Espero que sea el principio del fin de nuestros objetivos para esta central térmica no se instale en Arcos", dijo Franco, quien aplaudió la actuación de la Consejería. "Parece que la institución andaluza está tomando de una vez por todas cartas en el asunto después de un tiempo de pasividad", afirmó.

Con todo, la portavoz de la Plataforma advirtió de que el camino para evitar la instalación de la central será "largo y complicado porque tenemos que enfrentarnos a una multinacional". Julia Franco, sin embargo, anunció que intensificarán las acciones de protesta para lograr que se destierren definitivamente los proyectos de ciclo combinado en el municipio gaditano.