La multinacional japonesa Sony recortará hasta 20.000 empleos en los tres próximos años

Sony, el segundo mayor fabricante del sector electrónico del mundo, anunció ayer que prevé eliminar 20.000 puestos de trabajo, el 10% del total de la plantilla, en los próximos tres años. La multinacional japonesa quiere, según un portavoz, reorganizar sus negocios, deshacerse de los menos rentables y reducir costes. Entre otras medidas, una emblemática: dejará de producir televisores convencionales en Japón.

Los detalles del plan de reorganización serán informados por Sony el próximo 28 de octubre, pero, según lo que adelantó ayer el diario Nihon Keizai, la multinacional, entre otras medidas, suspenderá la producción de tubos catódicos para equipos de televisión en Japón para antes del final de 2004 debido al auge de las pantallas planas, en especial las de cristal líquido. Los costes de mano de obra también tienen que ver con la decisión, ya que Sony puede producir en otros países del sureste asiático a un precio menor del que lo haría en Japón.

La situación de la empresa es delicada. Durante el segundo trimestre del año redujo un 74% su beneficio por la caída de la facturación. Con el plan, la empresa prevé elevar sus márgenes de beneficios en al menos seis puntos porcentuales. Pero todo son especulaciones, puesto que aún no está claro cuál será la táctica de la empresa. Las primeras informaciones apuntan a que entre 1.500 y 2.000 del total de empleos que se prevén eliminar son puestos administrativos. Por otra parte, filiales de la empresa como Sony Music planean suprimir otros miles de empleos que no se sabe aún si forman parte del total o serán contabilizados aparte. También se calcula que Sony gastará unos 1.300 millones de dólares para llevar a cabo el plan, entre indemnizaciones y prejubilaciones.

Sony es la última de las grandes empresas de la electrónica que emprende un recorte de empleo de tal magnitud, puesto que rivales como Fujitsu, NEC y Toshiba ya han suprimido unos 70.000 empleos en los últimos años. Sony ahora apuesta por nuevos productos como consolas portátiles de videojuegos y la próxima generación de su consola PlayStation.

Por su parte, la filial española de Sony descarta que la fábrica de televisores de Viladecavalls (Barcelona) se vea afectada por un recorte de empleo en la multinacional japonesa. Un portavoz de Sony España señaló que la factoría catalana, con 1.100 trabajadores fijos y unos 300 temporales, atraviesa una buena situación y su nivel de producción se encuentra "a tope". No obstante, el portavoz de Sony España aclaró que ninguna "información ha sido confirmada".