El fútbol combate el hambre en Brasil
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha descartado la posibilidad de jugar el partido de fútbol benéfico en el estadio Maracaná que el próximo domingo disputarán ex deportistas y artistas con el fin de recaudar fondos para el programa Hambre Cero, con que el Gobierno pretende asistir a unos 24 millones de personas de bajos recursos. Sin embargo, fuentes oficiales descartaron hoy la participación del jefe de Estado, fundamentalmente por razones de seguridad en un estadio que, ese día, puede llegar a recibir 90.000 aficionados. El partido benéfico se celebrará antes del clásico que disputarán el Flamengo y el Vasco da Gama, dos de los más enconados rivales del fútbol carioca, por la trigésimo sexta jornada de la liga nacional. Lula es un ferviente aficionado al fútbol, hincha fanático del Corinthians y casi todos los fines de semana organiza partidos en su residencia oficial de Brasilia, donde suele jugar con sus ministros.
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