Constituido el consorcio para la conservación de Alcalá de Henares

El Consorcio de Alcalá de Henares ya es una realidad cinco años después de que la Unesco declarara al casco histórico de Alcalá y a su universidad como patrimonio de la humanidad. La primera reunión del Consejo de Administración del Consorcio se celebró ayer. Este organismo está formado por la Consejería de las Artes de la Comunidad de Madrid, la Universidad de Alcalá y el Ayuntamiento de la ciudad, y tiene la misión de coordinar las políticas e inversiones relacionadas con la riqueza artística y cultural de Alcalá siguiendo lo establecido en el reconocimiento de la Unesco.

"Con la constitución del Consorcio de Alcalá de Henares Patrimonio de la Humanidad, se dota de un instrumento fundamental para la acción positiva y coordinada de todas las administraciones públicas", explicó ayer el consejero en funciones de las Artes, Carlos Baztán. Bartolomé González, alcalde de Alcalá, destacó la importancia de "hacer realidad un acuerdo adoptado hace cinco años".El consorcio contará con personalidad jurídica propia y un presupuesto, aún no decidido, que se nutrirá de las transferencias que le hagan las administraciones públicas y otros entes que participen en él.

Primera aportación

La primera aportación económica será de 600.000 euros, ingresados por la Comunidad de Madrid. La sede estará en el edificio del Ayuntamiento alcalaíno, en la plaza de Cervantes, y contará con la siguiente estructura orgánica: un presidente, un gerente, una comisión ejecutiva y un Consejo de Administración (el reunido ayer).

El presidente del consorcio será el alcalde de Alcalá, Bartolomé González, del PP. El consejero de las Artes, Carlos Baztán, ocupará la vicepresidencia primera, y el rector de la Universidad de Alcalá, Virgilio Zapatero, la vicepresidencia segunda. Todos ellos podrán delegar en una tercera persona el cargo dentro del consorcio.

Según lo firmado ayer, el nuevo organismo deberá redactar el plan director para el casco histórico de Alcalá de Henares y su entorno; impulsará la creación del Real Patronato y buscará que otras instituciones dependientes del Estado se integren en la iniciativa, principalmente los ministerios de Fomento y Cultura. También se ocupará de asegurar el mantenimiento y la adecuada gestión de las instalaciones, equipamientos y servicios que le transfieran las administraciones que forman parte del consorcio.

El gran objetivo del nuevo organismo es asegurar la conservación del casco histórico de la ciudad y promocionar su imagen como "primer modelo de ciudad diseñada para ser centro universitario en la edad moderna", un modelo que luego fue exportado y copiado por numerosas ciudades europeas y latinoamericanas, según consta en la declaración del consorcio. El casco histórico de la ciudad y la universidad que en él está situada fue declarado conjunto histórico en 1968. Treinta años después, en 1998, fue declarado patrimonio de la humanidad por la Unesco.