"Intentamos un cambio tranquilo y una suma inteligente de personas"

Enric Morera, abogado de 39 años con larga trayectoria en la formación nacionalista, lo dejó todo después de fracasar en las elecciones municipales de 1999, en las que aspiraba a la alcaldía de Valencia. Ahora vuelve para tratar de relanzar una organización que, en su opinión, no atraviesa por su peor momento. "El Bloc ha madurado, se ha vertebrado, se ha extendido, ha incorporado gente nueva; en general lo veo bien, pero creo que son necesarios algunos cambios", señala Morera, que añade que de este congreso "tiene que salir el nacionalismo valenciano del Siglo XXI".

Asegura que desde que presentó su candidatura ha trabajado con el objetivo de lograr una sola lista. Aunque considera que si, al final, los militantes tienen que optar entre dos candidaturas, "no hay peligro de fisura ni ruptura", porque el Bloc es un partido "muy cohesionado" y un proceso así "no dejará huellas". También cree que sería mejor "no salir del congreso con una cierta sensación de división".

Pero ese deseo de alcanzar un acuerdo se ve dificultado porque, cuando compara las dos candidaturas, Morera ve "diferencias en cuanto a modelo organizativo y formas de trabajar". Morera rechaza el calificativo de oficialista y niega que Pere Mayor esté detrás de su proyecto. "Cuando presenté mi candidatura con sólo un secretario general [sin aspirante a presidente] se interpretó como una candidatura personalista y se dijo que detrás estaba Pere Mayor; pero esa no era la intención", asegura.

"Intentamos propiciar un cambio tranquilo, que logre la suma inteligente de personas, pero sin excluir ni arrinconar a nadie" señala Enric Morera, que define al Bloc como "una suma inteligente de personas y capacidades" que, en el plano político, de cara al futuro tiene que optar por un "valencianismo de conciliación y de superación de conflictos". Sobre todo para crecer en las ciudades, especialmente en Valencia, donde el candidato considera necesario buscar "un discurso propio".