San Gil reprocha a Cascos su "poco respeto" por los donostiarras

La portavoz del PP en el Ayuntamiento de San Sebastián, María San Gil, echó ayer en cara al ministro de Fomento, su compañero de partido Francisco Álvarez-Cascos, el "poco respeto" con que ha tratado a los donostiarras al anunciar en el Senado que va a rescindir el contrato de las obras del teatro Victoria Eugenia. El alcalde, Odón Elorza, criticó la forma de dar la noticia e indicó que sigue intentando que algún responsable ministerial le reciba.

La Junta de Portavoces del Ayuntamiento se reunió ayer con la intención de analizar la decisión del Gobierno central y tomar las medidas oportunas. Los grupos municipales no alcanzaron acuerdo alguno durante la reunión, en la que volvió a quedar patente el enfrentamiento entre el PSE-EE y el PP, que se culparon mutuamente del fracaso de las obras.

Tras firmar un convenio con el consistorio, propietario del teatro, para pagar las obras al 50%, el Ministerio de Fomento adjudicó los trabajos de remodelación en julio de 2001 por 7,6 millones de euros a la empresa Necso. Las obras arrancaron a finales de ese año, con un plazo de ejecución de 32 meses. En noviembre de 2002, la dirección de la obra presentó una modificación del proyecto, a la que se sumó otra en julio pasado. Estos cambios han incrementado el precio inicial de la reforma en un 52%, según Fomento, que legalmente no acepta subidas de más del 20%.

La empresa paralizó las obras en enero, pues no tenía claro quién iba a pagar el sobrecoste de los trabajos, motivado por actuaciones no previstas en el proyecto inicial. Paradójicamente, Fomento aprobó el pasado julio prorrogar 18 meses la ejecución de las obras.

El miércoles, en respuesta a una pregunta del senador del PNV Xabier Albistur, Álvarez-Cascos anunció sorpesivamente en el pleno de la Cámara alta que rescindirá el contrato con Necso y la dirección de la obra, encargará un nuevo proyecto y sacará de nuevo a concurso los trabajos. "El proyecto inicial queda desnaturalizado", dijo.

"Errores e insuficiencias"

La medida de Fomento pilló por sorpresa al Ayuntamiento. "Esa manera tan educada de comunicar una decisión tan trascendental está dentro de la línea institucional a la que nos tiene acostumbrados el PP", ironizó ayer Elorza.

El alcalde agregó que el proyecto inicial que aprobó y licitó Fomento contenía "errores e insuficiencias", que han hecho precisa su modificación. Elorza aseguró que el ministerio estaba al tanto de los cambios. En cualquier caso, arremetió contra los responsables de Fomento, porque "no han respondido" a sus peticiones de reunión. El deseo del consistorio era que diera el visto bueno a un proyecto complementario para solventar legalmente los sobrecostes sin necesidad de convocar otro concurso, lo que retrasará de forma notable la reforma.

Elorza volverá a llamar otra vez a la puerta de Álvarez-Cascos para tratar de reunirse con los responsables del ministerio y recibir información sobre sus intenciones. "Espero que no cambie de criterio y diga que no va a seguir asumiendo el 50% del coste del nuevo proyecto con las modificaciones necesarias", apuntó Elorza, quien subrayó que "es muy importante la voluntad política".

San Gil empezó sus declaraciones reprendiendo a Cascos. "Los donostiarras merecemos un trato más cortés", dijo la edil, quien trasladará su malestar a Fomento en la reunión que tendrá el martes con el secretario de Estado de Infraestructuras, Benigno Blanco, ante quien defenderá los intereses de los donostiarras. Pero, acto seguido, agregó que parte de la situación es responsabilidad de Elorza por su "falta de liderazgo" ante el ministerio.

El portavoz de PNV-EA, Román Sudupe, se lamentó de los continuos rifirrafes entre socialistas y populares y se preguntó si Elorza es un interlocutor válido para Madrid. El edil demandó también a Fomento que siga asumiendo la mitad del coste de la reforma del teatro con los cambios oportunos.