Multa para el delegado de la Generalitat en el Ebro por no asistir a un juicio
El delegado del Gobierno en las tierras del Ebro, Francesc Sancho (CiU), fue multado ayer con 3.000 euros por su incomparecencia en el juicio que se tenía que celebrar en Tortosa por el presunto atentado de que fue objeto él mismo el pasado año durante una manifestación contra el trasvase del Ebro convocada frente a la Delegación del Gobierno autónomo. En el transcurso del acto reivindicativo, Sancho, alcalde de L'Ampolla, cayó al suelo al ser zarandeado.
Un millar de personas se reunieron ayer en Tortosa para apoyar a Josep Sabaté, el joven que supuestamente provocó la caída de Sancho. Éste optó ayer por no presentarse ante el juez, acción que comportó la reprobación del ministerio público, puesto que se le había citado en calidad de testigo de cargo.
La incomparecencia de Sancho mereció también la condena de los militantes de la Plataforma en Defensa del Ebro (PDE), que aseguraron que supone una burla "al sistema judicial y a la gente de las tierras del Ebro", según Manel Tomàs, portavoz de la PDE. Tomàs dijo estar convencido de que la ausencia del delegado de la Generalitat se debía a "la vergüenza que le supondría" encontrarse allí "cuando Josep Sabaté es inocente". El portavoz de la plataforma consideró que el delegado de las tierras del Ebro quedará "en ridículo" en el próximo emplazamiento judicial.
Fuentes de la Delegación del Gobierno en las tierras del Ebro aseguraron que la ausencia de Francesc Sancho se debió a motivos personales y afirmaron que estaba previsto dar una respuesta oficial hoy.
