La UE abre la puerta a los nuevos socios tras el éxito de los referendos de adhesión

La Comisión Europea ha saludado con un expresivo "¡bienvenidos a casa!" el final del largo proceso de consultas populares registrado en los países candidatos que se incorporarán a la Unión Europea el 1 de mayo del año que viene. Nueve de los 10 países han celebrado referendos con resultados positivos. Sólo Chipre, la isla aún dividida entre la parte griega y la turca, ha optado por no celebrar esa consulta, mientras los Quince aún confían en un difícil acuerdo para evitar que se incorpore al club sólo la parte sur, la grecochipriota, la única reconocida oficialmente por la Unión en la que el 74% de la población está a favor de la adhesión, según el último sondeo de Gallup.

La última de las consultas populares se registró el pasado domingo en Letonia. Al refrendar el Tratado de Adhesión con un apoyo del 68% de los votantes, los letones cerraron ese proceso que despeja el camino a la ampliación más grande de la historia de la Unión, que pasará de 15 a 25 Estados, y de 374 millones de habitantes a 450. Polonia, con 38,6 millones de habitantes, es el país más poblado de los aspirantes. En el lado opuesto se sitúa Malta, con sólo 400.000 ciudadanos.

Malta ha sido el único país en el que los votos afirmativos han estado por debajo del 60% de los emitidos. De hecho, alguna encuesta previa apuntó la posibilidad de una respuesta global negativa, lo que hubiera eliminado la entrada de ese país. El resultado (sólo el 53,6% a favor y más de un 46% en contra) fue especialmente significativo porque la participación fue especialmente elevada: un 91%. Por el contrario, el cómputo más positivo se registró en Eslovaquia, con un 92,4% de votos afirmativos y sólo un 6,2% en contra.

El coste de la ampliación para el periodo 2004-2006 será de 49.000 millones de euros. Desde que en 1990 se inició la aproximación de esos países a la Unión, los socios del club han aportado aproximadamente el 0,05% del producto interior bruto de la Unión, mucho menos de lo que supuso entre 1948 y 1951 el Plan Marshall (alrededor del 2%), según datos oficiales de la Comisión.

La renta media de los nuevos países apenas llega al 40% de la actual Unión. En la UE de los Quince, la renta media por habitante es de 22.500 euros, tres veces más que la registrada en Lituania o Letonia (6.600 euros en ambos casos). Chipre, con 18.500 euros, es el que más se aproxima a la media europea actual.

La siguiente ampliación está prevista para 2007, con el ingreso de Rumania y Bulgaria. A finales de 2004, la UE decidirá también si inicia o no las negociaciones con Turquía, que podría convertirse en el primer país musulmán del club europeo. En los próximos años también se producirán las negociaciones de adhesión con los países de los Balcanes.