El Parlamento andaluz rechaza el cierre de las factorías de Altadis
El Parlamento de Andalucía rechazó ayer por unanimidad la drástica reducción de empleo que pretende la empresa tabacalera Altadis en sus factorías de Sevilla y Cádiz. Los cinco grupos de la Cámara, incluido el Partido Popular, instaron a los Gobiernos central y andaluz a acometer medidas de actuación que impidan el cierre de la histórica fábrica sevillana y el despido masivo de la plantilla gaditana. Al término del debate, algunos trabajadores que siguieron el pleno se abrazaron llorando a los diputados.
La Cámara regional aprobó dos proposiciones no de ley de IU y el PSOE en la que se rechaza el plan de remodelación anunciado por Altadis el 23 de julio, que supondrá, en el caso de Andalucía, la desaparición de 400 empleos. La antigua Tabacalera, una empresa privatizada por el Gobierno de José María Aznar, quiere cerrar su fábrica de Sevilla y dejar a la mínima expresión la plantilla de Cádiz, cuando en 2002 declaró un beneficio neto de 430 millones de euros.
El Parlamento, además de mostrar su solidaridad con los trabajadores, instó al Gobierno que preside Manuel Chaves a adoptar medidas urgentes destinadas a evitar los despidos; entre ellas, "la personación en el momento adecuado en el expediente de regulación de empleo". También se insta a la Consejería andaluza de Cultura a que haga las actuaciones necesarias para proteger el "patrimonio cultural de la fábrica de tabacos, con el fin de que todos sus fondos permanezcan en Andalucía bajo tutela" de la Administración autónoma. El Ayuntamiento de Sevilla ya aprobó una moción en la que advertía de que se opondría a recalificar los terrenos Altadis, enfrente de la Torre del Oro.
