La CHJ asegura estar preparada para las lluvias torrenciales

La Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) aseguró ayer que trabaja todo el el año para poder afrontar precipitaciones torrenciales como las anunciadas para este otoño y que está preparada. Además, el jefe de área de Explotación de la CHJ, José Luis Utrillas, subrayó la buena situación de los embalses que gestiona. Una holgura producida gracias a las lluvias de la pasada primavera y que ha permitido que, a pesar de que el calor disparó en un 20% el volumen de agua consumida, los pantanos aún estén al 28,6% de su capacidad y afrontan el próximo curso con garantías.

Ayer volvió a llover en diferentes puntos de la Comunidad Valenciana aunque en general cayó menos agua que en jornadas anteriores. Las precipitaciones, rápidas y muy intensas, se iniciaron en la madrugada de ayer en el sur de la provincia de Valencia y el norte de la de Alicante. Más entrada la mañana también afectaron a algunos puntos de Castellón. Las tormentas estuvieron en algún caso concreto acompañadas de granizo. El agua caída superó levemente los 30 litros por metro cuadrado, como ocurrió en la Ribera Alta, donde se llegaron a registrar 34 litros por metro cuadrado en Antella, 19 en Algemesí y 11 litros en Tous.

En Valencia también se midieron cantidades destacadas en Enguera o la Canal de Navarrés, donde llegaron a caer 27 litros por metro cuadrado. La Vall de Gallinera, con 19 litros por metro cuadrado o Alcalalí con 24 litros fueron los municipios alicantinos donde se vivieron las precipitaciones más copiosas.

El tornado, que tuvo el núcleo principal en Dénia, también afectó a la comarca de L'Alcoià, informa Lucía Gadea. Poco después de las siete de la mañana descargó una tromba de agua que dejó 22 litros de agua por metro cuadrado en 20 minutos. El agua inundó la carretera Nacional 340 a su paso por Cocentaina, donde quedó cortada cerca de 40 minutos. Otro punto conflictivo fue el Puente de Cervantes en Alcoi, que quedó cerrado al tráfico por acumulación de agua. Se desplomaron ramas de árboles y el pavimento de algunas calles quedó dañado.

La lluvia y el viento afectaron también a campos de L'Alcoià y El Comtat, que quedaron teñidos de blanco por unos instantes por el granizo. El temporal provocó el desbordamiento de ríos en caminos rurales. Los cultivos no resultaron seriamente dañados. Las tormentas localmente fuertes y con granizo volverán a registrarse esta tarde, según las previsiones del Centro Meteorológico de Valencia.