Todas a cien

Con la llegada del euro desaparecieron los rótulos de Todo a cien, que no las tiendas, reconvertidas, con los precios redondeados al alza. Los rótulos han vuelto a los manidos y anodinos Artículos de Casa y Regalo, porque Todo a 0,60 carece de gancho. Pero hay que reconocer que la frase era sugerente, atractiva y definitoria de una serie de supuestos, aplicable a situaciones ajenas a la compra / venta.

Quizá eso ha influido en nuestros gobernantes, celosos del bien común y de que nada se pierda, que han decidido darle nueva vida y un nuevo propósito. Ahora se ha convertido en Todas a cien, al haber aprobado una ley que concede a todas las madres de niños pequeños un sueldo mensual de 100 euros, independientemente de sus diversas situaciones familiares y personales.

Está claro que mientras muchas se apresurarán a reponer dodotis, otras no le darán importancia alguna, que poca cosa es la que tiene en sí misma. Pero no seamos ingratos, apreciemos el gesto. Es el primer atisbo de movimiento en favor de la mujer y hay que darle la bienvenida. No digo lo del movimiento en una alusión a los fenecidos puntos, aunque es inevitable el recuerdo de reposición. Todo es empezar, pensar en el asunto y confiar en que lo aumenten, lo maticen, lo multipliquen. ¡Adelante!