Insuficiente

La evolución de la economía estadounidense, en la que se centran todas las esperanzas de reacción de las Bolsas, no termina de alcanzar el ritmo previsto, aunque los indicadores continúan aportando más datos positivos que negativos.

Ayer se conoció el incremento de 4,3 puntos en el índice de confianza de los consumidores en este mes de agosto, con fuerte avance de las expectativas y una visión negativa de la situación actual, al tiempo que la venta de casas nuevas frenaba su crecimiento en julio y los pedidos de bienes duraderos acumulaban su tercera subida mensual consecutiva, pero con un insuficiente 1%.

La respuesta de los inversores ante este conjunto de datos relativamente positivos se dejó llevar por la frustración y fue negativa, con una caída del 0,78% en el índice Dow Jones a media sesión y el consiguiente impacto en los mercados europeos, cuyos cierres fueron negativos.

El Ibex 35 cedió el 0,51% tras una apertura tranquila en la que papel y dinero encontraban un confortable equilibrio producto de la ausencia de presiones. La contratación en el Mercado Continuo quedó en 963,11 millones de euros, que son fruto de la ausencia de expectativas claras a medio plazo.

El mercado sigue apoyándose en las expectativas de mejora de la economía y en unos resultados empresariales que tienen el mérito de mejorar en plena crisis, de ahí que la percepción de riesgos haya descendido hasta niveles impensables en pleno estancamiento económico.

La mejora de la confianza empresarial en Alemania por cuarto mes consecutivo es un claro ejemplo de ese cruce de expectativas y datos reales que invitan a los inversores a mantener posiciones o a jugar a muy corto plazo.

Aun así, las dudas mostradas por los inversores estadounidenses calaron hondo en Europa y las pérdidas superaron el 1% en todos los grandes mercados. La Bolsa de París bajó el 1,05%, Londres el 1,15% y Francfort perdió el 1,28%.