_
_
_
_

Un millón de firmas exigen la elección de un nuevo gobernador en una California en crisis

El secretario de Estado de California, Kevin Shelley, tenía previsto certificar anoche (madrugada de hoy en España) que más de un millón de votantes californianos han firmado la petición para que se convoque a una nueva elección de gobernador. Si California estaba ya en medio de una profunda crisis financiera con un déficit anual en el presupuesto del principal Estado del oeste de EE UU de 38.000 millones de dólares, hoy la crisis también es política. Una vez que el secretario de Estado oficialice la convocatoria electoral, ésta habrá de celebrarse en un plazo de 60 a 80 días. Se presentará a los votantes una papeleta con dos preguntas: una sobre si están a favor de la nueva elección y la otra -sólo efectiva si la primera gana por mayoría- para que elija a uno de los aspirantes al cargo de gobernador. En la nueva elección literalmente cualquiera puede ser candidato. Sólo necesita conseguir 65 firmas de apoyo y pagar 3.500 dólares de registro. Es tal el desorden que hasta el columnista del periódico Los Angeles Times, Steve López (descendiente de españoles) se ha lanzado al ruedo.

Más información
California decidirá en un referendo si destituye a su actual gobernador

El actual gobernador, el demócrata Gray Davis, que ganó su segundo periodo en noviembre pasado, no ha cometido falta grave que justifique su salida, aunque se ha hecho muy impopular. La nueva votación tiene que ver con un derecho introducido en la Constitución de California en 1911, que permite a los ciudadanos volver a las urnas para elegir otros mandatarios siempre que consigan el número necesario de firmas. En esta ocasión el congresista republicano ultraconservador por San Diego, Darrel Issa, que donó un millón de dólares para financiar la campaña de recolección de firmas y será uno de los candidatos, inició hace unos meses la campaña por la nueva elección y nadie lo tomó en serio. Hoy, el liderazgo del partido demócrata está sumido en la confusión. No tiene un candidato serio como alternativa a Davis, y lo peor es que para hacerse con el cargo sólo se necesita obtener más votos que los demás rivales, es decir, con tan sólo un 10% o 12% se puede ser el nuevo gobernador de California.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_