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España cobrará por tramitar los visados aunque luego los deniegue

La Ley de Extranjería pretende evitar la "documentación basura"

Jorge A. Rodríguez

España pretende que los extranjeros paguen por anticipado por solicitar un visado de entrada en el país aunque luego se les deniegue. El cobro por tramitar el documento de viaje ha sido incluido en la reforma de la Ley de Extranjería, en la que también se prevé que el visado sea la llave para vivir en España sin necesidad de solicitar luego un permiso de residencia. El Gobierno pretende evitar así "solicitudes fraudulentas".

El cobro por anticipado del visado está contenido tanto en la exposición de motivos de la reforma como en el apartado tres del artículo 44 del texto enviado al Congreso. "Constituye el hecho imponible de las tasas la tramitación de la solicitud de visado", dice. El artículo 45 añade que "las tasas se devengarán en el momento de la presentación de la solicitud de visado".

El cobro por anticipado, de cantidades que oscilan, según el tipo de visado, entre los 10 y los 30 euros, está previsto en una decisión del Consejo de Europa del 20 de diciembre de 2001. España, al incorporar esta novedad en la reforma, se convierte en uno de los primeros países de la UE en adecuar dicha decisión en su ordenamiento jurídico en materia de inmigración y extranjería.

Ahora, la mera solicitud de un visado en una oficina consular es gratuita. Basta con rellenar la llamada "solicitud de visado Schengen", en el que figura claramente que el impreso es gratuito. España pide visado de entrada a los naturales de un listado de 135 países, además de a quienes procedan de Timor Occidental y a quienes estén bajo la égida de la Autoridad Nacional Palestina. En algunos casos, la tramitación corre a cargo de las embajadas de otros países de la UE, sobre todo Bélgica, Alemania y Francia. Este último país cobra, tras la concesión, una media de 25 euros por visado.

El propio ministro del Interior, Ángel Acebes, ha explicado que el cobro al tramitar la petición y no cuando se otorga persigue "evitar peticiones fraudulentas y la multiplicación de expedientes y de documentación con esos fines". La acumulación de peticiones llenas de "documentación basura" (peticiones que se presentan que carecen "manifiestamente de fundamento") está provocando en las oficinas consulares, según el Ministerio del Interior, "una ralentización de la gestión administrativa, perjudicando muy especialmente a los extranjeros que desean llegar y permanecer en nuestro país cumpliendo y respetando las exigencias legales".

Fuentes de Interior recordaron ayer mismo que el visado se va a convertir en la llave de entrada en España, ya que, cuando se apruebe la ley, quien lo tenga en su poder podrá permanecer en el país, sin necesidad de hacer más trámites, por el periodo de vigencia del documento de viaje. La cuantía de la nueva tasa por tramitación (de la que quedan excluidos los nacionales de terceros países beneficiarios del derecho comunitario en materia de libre circulación) se determinará en función de los gastos administrativos que genere, el tiempo de duración del visado, el lugar en el que se expida (más caro en frontera que en un consulado) o los posibles gastos de correo, mensajería o de teléfono, si se utilizan para gestionar el documento.

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Sobre la firma

Jorge A. Rodríguez
Redactor jefe digital en España y profesor de la Escuela de Periodismo UAM-EL PAÍS. Debutó en el Diario Sur de Málaga, siguió en RNE, pasó a la agencia OTR Press (Grupo Z) y llegó a EL PAÍS. Ha cubierto íntegros casos como el 11-M, el final de ETA, Arny, el naufragio del 'Prestige', los disturbios del Ejido... y muchos crímenes (jorgear@elpais.es)

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