La polémica del velo
Coincido plenamente con Vargas Llosa (El velo islámico, EL PAÍS, 22 de junio) cuando afirma que "la inmigración (...), en vez del íncubo que habita las pesadillas de tantos europeos, debe ser entendida como una inyección de energía y de fuerza laboral y creativa". Coincido también cuando dice que "es obvio que son los emigrantes quienes deben adaptarse a las instituciones de la libertad, y no éstas renunciar a sí mismas, para acomodarse a las prácticas o tradiciones incompatibles con ellas". El problema está, precisamente, en definir cuáles son esas prácticas. En mi opinión, no son equiparables la negativa de determinados musulmanes a que chicas y chicos compartan aula y la utilización del velo. Quizás sea el momento de establecer una lista de prácticas y tradiciones que atentan contra derechos humanos básicos, recogidos en nuestro ordenamiento jurídico, y de aquellas que pueden ser aceptadas.
El tabú del cabello femenino también sigue vigente en nuestra cultura dentro de las órdenes religiosas. Pero a nadie se le ha ocurrido prohibir que las religiosas utilicen toca porque sus compañeros varones no la utilizan ¿Habría que impedir el acceso de las monjas con toca a las aulas de la escuela laica? Opino que el tema es bastante más complejo de lo que lo plantea el señor Vargas Llosa; por ello, estoy en desacuerdo con su conclusión de que el velo islámico debe ser prohibido en las escuelas laicas.-
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.