_
_
_
_

Acuerdo "satisfactorio" para España

Gabriela Cañas

El ministro español Miguel Arias Cañete, tras una noche en vela de largas negociaciones, recibió a la prensa a las 9.45 de ayer con una declaración contundente: "El acuerdo es plenamente satisfactorio para España y financieramente positivo. En el periodo 2005-2013 el saldo es de 2.752 millones de euros de ganancia con esta reforma". Las cuentas de su departamento, hechas a las 7.30, son "error mínimo de un 2%", según Arias Cañete. Los capítulos más favorables (véase el cuadro) son las ganancias en desarrollo rural, leche y frutos secos.

España es el segundo país de la UE que más dinero recibe de la PAC (casi 7.000 millones de euros en 2001) y la reforma que en principio planteaba Bruselas perjudicaba seriamente sus intereses, según clamaba Madrid y según los sindicatos (algo que la Comisión siempre negó). Tras la larga negociación ha perdido sólo alguna batalla. Por ejemplo, no va a percibir tanto dinero para desarrollo rural como se preveía porque los países ricos consiguen retener el 80% de los recortes de las ayudas destinados a aumentar el apoyo al desarrollo rural. Pero ha obtenido compensación en otros importantes capítulos, "siempre con datos y argumentos en la mano", esgrime el ministro.

Más información
El sector agrario ve en peligro algunas explotaciones con la nueva PAC

España propuso en octubre pasado mantener ciertos vínculos a la producción y lo ha conseguido con el determinante apoyo franco-alemán, que pactó luchar por ese principio el 10 de junio pasado. Arias Cañete considera que tal vínculo garantiza las ayudas a las zonas más desfavorecidas, donde el riesgo de abandono de la producción es mayor. En ovino y caprino ha logrado dejar vinculada a la producción hasta el 50% de las primas. Ganó in extremis la batalla por Canarias, que mantendrá el sistema actual de ayudas, y también la planteada por los frutos secos, un sector para el cual habían terminado las ayudas. Ahora tendrá una ayuda permanente europea y quizá un subsidio nacional (de 120,75 euros por hectárea), lo que fue bien recibido, aunque con reparos, por un sector duramente castigado por los bajos precios de la avellana turca.

Finalmente, España se ha beneficiado de logros conseguidos con otros países, como el de no bajar el precio de intervención de los cereales y la prórroga de las cuotas lecheras hasta 2014.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Gabriela Cañas
Llegó a EL PAIS en 1981 y ha sido jefa de Madrid y Sociedad y corresponsal en Bruselas y París. Ha presidido la Agencia EFE entre 2020 y 2023. El periodismo y la igualdad son sus prioridades.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_