Zapatero anuncia que revelará "datos impactantes" sobre la trama

El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, anunció ayer ante la Ejecutiva Federal que "hay muchos más datos sobre la trama inmobiliaria de Madrid, muchos de ellos impactantes". El líder socialista anunció a la dirección de su partido una "ofensiva política", que continuará en el debate sobre el estado de la nación, para contraatacar en el asunto de la trama de especulación en la que, a su juicio, está involucrado el PP.

Zapatero compareció, tras la reunión de la Ejecutiva Federal del PSOE, la tercera en dos semanas, para anunciar que "ofrecerá una amplia explicación de lo sucedido con Eduardo Tamayo y Teresa Sáez [los diputados desertores del PSOE] una vez que concluya la investigación sobre la trama". Prometió que "irá a por todas" en la investigación de dicho asunto político-inmobiliario.

El líder del PSOE salió reforzado de la reunión que mantuvo con la dirección de su partido. Algunos dirigentes señalaron que existe un gran descontento en la calle con el PSOE por lo sucedido en Madrid. Pero Zapatero convenció a todos de que no era el momento de poner el foco en el PSOE sino en la "poderosa trama político inmobiliaria que ha sido capaz de desestabilizar un Gobierno autonómico salido de las urnas". "Lo avanzado en tan sólo una semana de investigación ha sido espectacular y aún lo será mucho más cuando se conozcan otros datos impactantes". Fue otro de los argumentos que Zapatero utilizó para convencer a su dirección de que la estrategia trazada para afrontar el escándalo ha sido la correcta.

También recordó que el PSOE ha reaccionado con la expulsión de los dos diputados traidores, Tamayo y Saéz, y de su jefe de filas, José Luis Balbás. Y, sin embargo, el PP no ha adoptado ninguna medida contra los constructores Francisco Vázquez y Francisco Bravo, afiliados a este partido, así como con su secretario general en Madrid, Ricardo Romero de Tejada, a los que las investigaciones publicadas apuntan responsabilidades. "La diferencia de involucración del PP y del PSOE en las tramas inmobiliarias es espectacular y también lo está siendo la respuesta de uno y otro partido", señaló Zapatero.

El líder socialista señaló que el debate sobre el estado de la nación, convocado para el lunes y martes, se enmarca en la ofensiva socialista para afrontar esta situación. Pero también anunció que no se dejará distraer exclusivamente por este escándalo sino que fiscalizará la gestión del Gobierno del PP de este último año, a la que calificó de "desastrosa".

En la rueda de prensa posterior, Zapatero anunció que el primer objetivo del PSOE es que se respete el resultado de las urnas en Madrid el 25 de mayo y que si al final son necesarias nuevas elecciones, es conveniente que "los madrileños conozcan antes lo que ha ocurrido". Adelantó que "el mejor mecanismo es una comisión de investigación que podría trabajar durante dos meses, el mismo tiempo que destinó el Congreso de los Diputados a la Comisión Gescartera". Dicha comisión debería aclarar asuntos como la visita a la sede del PP de uno de los constructores relacionados con Tamayo; "a qué planta subió y con quien estuvo". "Cuando el PSOE tenga la información necesaria para reconstruir los hechos los llevará a los tribunales y se expondrán públicamente", prometió Zapatero.

Respaldó a su secretario de Organización, José Blanco, situado en la diana de quienes reclaman responsabilidades políticas, al encargarle la investigación interna de este escándalo.

El secretario general del PP, Javier Arenas, replicó que su partido quiere que "se investigue lo sucedido en Madrid y a fondo". Pero, a través de una iniciativa propia del PP porque "no irá al rebufo de IU". Arenas estima que "es la Ejecutiva Federal socialista la que debe explicar qué relación existe entre la Federación Socialista Madrileña y los clanes urbanísticos del PSOE en vez de trasladar sus problemas al PP".

Negó cualquier responsabilidad del PP en la trama que denuncia el PSOE y que las querellas presentadas por los socialistas en los tribunales "son, según juristas consultados, de risa". Se refería a la querella que denuncia una connivencia entre los constructores Vázquez y Bravo, afiliados al PP, con el diputado desertor del PSOE, Eduardo Tamayo, y el secretario general del PP de Madrid, Ricardo Romero de Tejada.

En cuanto a la querella de la Fiscalía de Madrid por la presunta trama inmobiliaria en Alcorcón que afecta al ex alcalde del PP Pablo Zúñiga y a Bravo y Vázquez, Arenas respaldó a Zúñiga, quien había dicho que era "una causa archivada". Por ello, Arenas aseguró que no habrá ninguna medida disciplinaria contra Romero de Tejada, Bravo y Vázquez.