Camps asegura que el tren de alta velocidad será una realidad en 2007

"2007 es una cita con la historia, en 2007 el tren de alta velocidad será una realidad en nuestra Comunidad". Francisco Camps fijó ayer plazo a la finalización de las obras de construcción de la conexión ferroviaria de alta velocidad entre Madrid y las tres capitales de provincia de la Comunidad Valenciana en la primera entrevista que concede desde que accedió a la presidencia de la Generalitat el pasado jueves. Camps, en un nuevo gesto destinado a realzar su vocación valencianista, optó por las cámaras y micrófonos del sistema de Ràdio Televisió Valenciana.

Lluís Motes y Mayte Fernández, responsables de los informativos de Canal 9 y Ràdio 9, grabaron la entrevista a mediodía de ayer en el Saló Daurat del Palau. Los 20 minutos de conversación se emitieron pasadas las ocho de la tarde, antes de los últimos partidos de la Liga de fútbol. La grabación se interrumpió cuando el presidente ofrecía su primera respuesta debido a una deficiencia en el sonido. El problema técnico contrarió al presidente, que sólo logró recuperar la sonrisa al reiniciar el diálogo, pero el esfuerzo le costó algún trastabilleo.

Camps explicó que su Gobierno combina "experiencia y renovación", una de las claves de "todos los equipos del PP", "el único partido capaz" de aglutinar "la experiencia como punto de partida" con la incorporación de "nuevas ideas".

La nueva Consejería de Vivienda y Ordenación Territorial, que asume parte de las competencias de Obras Públicas y las de Medio Ambiente, fue definida como "la consejería de calidad de vida". Camps subrayó la importancia del entorno natural o doméstico para el desarrollo de la persona y recuperó la noción de "calidad de vida" barajada en alguna ponencia del PP regional, para señalar el fondo que inspira el nuevo departamento.

Las próximas elecciones generales, previstas para marzo de 2004, no afectarán la composición del equipo de gobierno. "El Consell es para toda la legislatura", sentenció Camps. Y aprovechó para sugerir que un futuro Gobierno del PP en Madrid es clave para garantizar la ejecución del Plan Hidrológico Nacional, del tren de alta velocidad o futuras bajadas de impuestos. "Es importante poder cooperar con el Gobierno central", apostilló.

La herencia de la gestión de Eduardo Zaplana, presidente de la Generalitat entre julio de 1995 y julio de 2002, y de José Luis Olivas, que culminó los meses pendientes del segundo mandato, se caracteriza por tres rasgos fundamentales según Camps: "La vertebración de la Comunidad Valenciana, la mayor presencia en España y el ensanche de los espacios sociales". "El peso de la Comunidad Valenciana en Madrid es fundamental gracias a Eduardo Zaplana", insistió.

Un breve inciso sobre la deuda de la Generalitat Valenciana, que sumaba 6.870 millones de euros a finales de 2002, fue desgajado del capítulo de la herencia que recibe el Consell. En todo caso, Camps restó importancia al volumen de las obligaciones que arrastra y se limitó a decir que la deuda "está aquilatada a una Administración con muchísimas competencias".

Las obras del Plan Hidrológico Nacional se deben ejecutar "cuanto antes". El presidente eludió señalar plazos o comentar trabas al proyecto, pero subrayó el carácter inexorable del trasvase: "Es una ley".

También recordó su insistencia al plantear el debate en torno al trasvase de aguas del Ebro durante la reciente campaña: "Era una cuestión esencial". Y añadió: "Los ciudadanos han apoyado nuestro proyecto porque quieren agua".

Sí señaló plazos para la ejecución del tren de alta velocidad. Aludió como preámbulo al carácter "potentísimo" que supone "una red" de alta velocidad capaz de conectar las tres capitales de la Comunidad Valenciana con Madrid, incluso citó una futura conexión con Tarragona. Y sentenció: "2007 es una cita con la historia. En 2007 el tren de alta velocidad será una realidad en nuestra Comunidad". Nadie mencionó las próximas elecciones autonómicas, otra cita con la historia que Camps afrontará el último domingo de mayo de 2007.

La culminación del "mapa escolar" salió a colación al abordar el sistema educativo, pero el presidente optó por acentuar "el salto fundamental" de la enseñanza en valenciano en los últimos años para expresar un compromiso: "El valenciano no debe ser sólo una lengua doméstica, sino una lengua considerada incluso a nivel europeo".

"Las cosas, por su orden"

La legislatura que acaba de comenzar debe suponer un impulso a la política de investigación y desarrollo. El presidente ofreció su versión de la historia reciente para explicar la situación. "Las cosas, por su orden". Primero hubo que negociar infraestructuras básicas para la Comunidad Valenciana como el tren de alta velocidad o el trasvase de aguas del Ebro; luego "añadir valor al territorio", a través de "apuestas" como Terra Mítica, el Proyecto Cultural de Castellón o la Ciudad de las Artes y las Ciencias; finalmente, es la hora del impulso de la I+D. Camps habló de una "comisión delegada de asuntos de investigación" que mantendrá reuniones periódicas para coordinar inversiones públicas y privadas. Competencias que asumió hace unos meses la reciente Agencia de Ciencia y Tecnología.

La conversación incluyó una descripción del reiterado objetivo de pleno empleo que se ha marcado el Consell. "A más empleo, menos temporalidad; más autoempleo; si crece la tasa de actividad hay más oferta; más oportunidades", dijo Camps.

Y una nueva invitación al diálogo con la oposición, a hacer un esfuerzo para encontar "puntos de concordia" en lugar de plantear "lo fácil, la discordia": "Es fundamental que el Parlamento autonómico sea el eje de la vida política".