El proyecto más arriesgado de Pimentel

A sus 41 años, Manuel Pimentel ha abandonado y regresado a la política varias veces. En ese ir y venir, ha saboreado las mieles del éxito y del poder (ministro de Trabajo), pero también ha conocido de primera mano sus aspectos más amargos, como pueden ser las intrigas, las conspiraciones o las envidias. En este tiempo, ha renunciado a amigos y a un partido, el PP, en el que echó los dientes y en el que nadie se atrevía a adivinar los límites de su meteórica carrera. Ahora que está a punto de pasar por tercera vez a la esfera pública, ya fuera del PP, Pimentel se enfrenta al proyecto más arriesgado que ha iniciado nunca: la constitución de un partido de centro que sea capaz de hacerse un hueco en la política andaluza.

El foro tendrá entre ocho y diez ponencias que se someterán a enmiendas en la red

Esta iniciativa, que de momento se ha configurado como un foro que se llamará Nueva sociedad, nuevas propuestas, pone de manifiesto el carácter emprendedor de Pimentel, un ingeniero agrónomo que ha sido político, empresario, novelista, articulista y que siente fascinación por la arqueología, la ciencia o las estadísticas.

La formación de un partido de centro era una idea que Pimentel barruntaba desde hace tiempo, aunque muy pocos diesen credibilidad a los mensajes entre líneas del último año en los que insinuaba esta posibilidad. Tras dimitir como ministro en 2000, Pimentel planificó su vida en base a sus proyectos empresariales; sus libros (tres novelas publicadas); sus tribunas periodísticas (ha escrito varios centenares en estos años) y esporádicas intervenciones públicas, como conferencias. De política, nada de nada.

Con el paso de los meses, Pimentel se fue distanciando de algunos posicionamientos del PP (la inmigración o la actitud ante el PNV en el País Vasco), aunque también ha valorado la política económica del Gobierno o su firmeza ante el terrorismo.

Con la disolución de la dirección del PP de Córdoba empezó a pensar que había otra forma de hacer las cosas. Vio que el talante del PP se iba escorando a la derecha, algo que confirmó con el apoyo del Gobierno a la guerra de Irak, el motivo final de su baja como militante popular. "Ha llegado a la madurez personal de creer que puede hacer algo diferente en política", afirma una persona de su entorno.

Pimentel dejará sus responsabilidades empresariales el 30 de junio. El día siguiente comenzará a trabajar con intensidad en este foro y su objetivo es dar forma al proyecto entre julio y agosto de forma discreta. A partir de septiembre tendrá más presencia pública, pero no excesiva. El foro se va a articular en torno a ocho o diez ponencias, que en su momento se colgarán en la red para que quien quiera pueda hacer enmiendas.

Si todo sale como él piensa, en diciembre anunciará si concurre a las próximas elecciones autonómicas. "Si no sale, no pasa nada. Se entregarán las conclusiones a los demás partidos por si las quieren usar", dice una fuente cercana al ex ministro.

La idea de Pimentel y de las personas que le rodean (de momento se sabe que ex militantes del PP como Enrique Bellido én Córdoba o Francisco Nieves, de Huelva) es hacer un proyecto de "abajo a arriba". Y es que en la mente de quienes componen el foro está el fracasado proyecto de centro que en su momento intentó poner en marcha el ex ministro de UCD Manuel Clavero Arévalo.

Pimentel ha llegado a la conclusión de que el proyecto del PSOE en Andalucía está agotado, pero que el PP ha sido incapaz de generar una alternativa creíble y que ahí está el hueco al que él aspira. En los próximos meses, Pimentel tiene el propósito de patearse toda Andalucía y hará especial hincapié en los pueblos. Su objetivo es atraer el voto de las clases medias urbanas y rurales, donde cree que está su caladero de votos a tenor de las encuestas que ha analizado en los últimos meses.

Todavía es una incógnita quién más le acompañará en esta aventura, aunque la idea de quienes componen el foro es buscar a personas que sean referentes en sus respectivas provincias por su profesión: ya sea en la universidad, en la empresa, en movimientos asociativos... El pasado lunes, cuando presentó el foro, hizo un guiño a su amiga y ex compañera en el ministerio Amalia Gómez, aunque fuentes del PP afirman que ésta ya ha hecho llegar a la dirección regional que seguirá como militante popular.

¿Y los recursos? "Tenemos muy pocos medios y es un tema que hay que analizar. Para los gastos ordinarios empezaremos por las cuotas de quienes participen. Para los gastos extraordinarios

ya veremos", dice un miembro del foro.

Pimentel no quiere que parezca que su foro nace contra el PP, formación en la que tiene a algunos de sus mejores amigos y a la que quiere tratar con exquisitez. De los amigos perdidos destaca el secretario general del PP, Javier Arenas. Hace una década ambos pusieron patas arriba al PP andaluz hasta convertirlo en una fuerza con expectativas de gobierno en Andalucía y fue en esa época cuando Pimentel se labró el amplio predicamento y respeto interno que aún conserva.

Ahora la situación es diferente. "Siente vértigo e incertidumbre. Pero tiene claro que una cosa es torear en el salón y otra es tirarse al ruedo, que es lo que hacen los valientes", afirma una persona de su entorno.