La policía prepara una operación para proteger a los turistas en verano

Casi 1.000 policías nacionales y municipales participarán durante julio y agosto en la Operación Turista 2003, cuyo objetivo es proteger a los extranjeros que visitan Madrid, víctimas predilectas de los delincuentes. En esta lucha contra los atracos a turistas, la policía ha pedido ayuda al sector: ha puesto a su servicio un teléfono y un correo electrónico para que informe de cualquier movimiento sospechoso para la seguridad.

El objetivo de Turista 2003 es "elevar las cotas de seguridad y hacer un ofrecimiento de tranquilidad a quienes nos visitan", según explicó ayer Francisco Javier Ansuátegui, delegado del Gobierno en Madrid. El plan prevé la actuación conjunta, "como una sola máquina policial", del Cuerpo Nacional de Policía y de la Policía Municipal, que aportarán un total de 959 agentes, de los que 300 serán alumnos en prácticas recién salidos de la academia de policía de Ávila.

El operativo se desplegará en los distritos de la capital más visitados por los turistas y más trabajados por los delincuentes (sirleros, carteristas, descuideros, tironeros...), así como en las zonas donde se concentran los principales hoteles: los distritos de Arganzuela, Salamanca, Centro (con especial atención al eje paseo del Prado-Puerta del Sol-Plaza Mayor), Moncloa, Retiro y el aeropuerto de Barajas. El refuerzo se extenderá a Alcalá de Henares y Aranjuez. Precisamente, en ese eje paseo del Prado-Plaza Mayor fue asesinada la turista griega Cristanti Papadopoulos, de 32 años. Dos jóvenes magrebíes la acuchillaron junto al Congreso de los Diputados el domingo 8 de junio para robarle una videocámara.

El nuevo jefe superior de Policía de Madrid, Miguel Ángel Fernández Rancaño, aseguró que antes de lanzar el plan se ha hecho un análisis "del tipo de víctima, las características del autor, la hora y las zonas del delito". De esta forma se ha comprobado que el 80% de los delitos contra turistas son hurtos al descuido.

Los planes fueron explicados ayer al sector turístico madrileño y a los representantes de los consulados de Estados Unidos, Japón, Reino Unido y Francia, países que aportan el grueso del turismo en la capital. Según Ansuátegui, algunos de los reunidos pusieron pegas al plan. Los diplomáticos dijeron que debería comenzar en mayo, que es cuando sus nacionales empiezan a disfrutar de su visita a Madrid. Los representantes de los bares y las cafeterías indicaron que el mayor número de asaltos los sufren de noche, y no a mediodía, cuando el plan está a pleno rendimiento. Los hoteleros insistieron en la necesidad de vigilar, en las horas del almuerzo y la cena, los itinerarios entre sus establecimientos y los restaurantes.

La policía, además, quiere que todo el sector turístico de Madrid se convierta en una red de información para prevenir los delitos cometidos contra turistas. Para ello ha facilitado a los operadores turísticos un número de teléfono, un correo electrónico y un número de fax, así como un impreso, para que den "cualquier información que pueda afectar a la seguridad dentro del sector turístico".

El impreso para informar a la policía fue entregado a los representantes de las asociaciones del sector en la citada reunión que mantuvieron en la Jefatura Superior de Policía con Ansuátegui, Fernández Rancaño, y el inspector jefe de la Policía Municipal de la capital, José Luis Morcillo para explicarle los objetivos de la Operación Turista 2003.

En el documento se pide al sector que, "con el fin de aumentar la seguridad del turismo", comunique "cualquier información que pueda afectar a la seguridad dentro del sector turístico". La policía explicó ayer que el objetivo es que "informen de movimientos sospechosos que crean que pueda afectar a la seguridad".