Marisa Paredes reelegida por unanimidad presidenta de la Academia de Cine

Fue una decisión respaldada por todos los miembros de la asamblea celebrada ayer en Madrid. Marisa Paredes se ha situado de nuevo al frente de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España. Nadie quiso presentar una candidatura alternativa y la actriz decidió que todavía había mucho trabajo por hacer y optó por asumir la presidencia de nuevo. Sus compañeros le respaldaron. Uno de los retos que se han marcado la actriz y su equipo directivo es el de abrir los premios Goya al cine latinoamericano para "acoger una realidad ya presente en el cine español".

Marisa Paredes, Antonio Chavarrías y Joaquín Oristrell fueron reelegidos ayer, y por unanimidad, como presidenta y vicepresidentes primero y segundo, respectivamente, de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España, que ayer por la mañana celebró en el madrileño cine Doré su asamblea general, en la que se oyeron aplausos en algunos momentos. Fue una asamblea de trámite, cuyo orden del día -la reelección de la junta presidencial, con Marisa Paredes al frente y el cineasta Joaquín Oristrell junto al productor Antonio Chavarrías como vicepresidentes de esta institución- fue breve. Y así, en apenas 15 minutos, los 60 académicos allí presentes votaron a favor de que este equipo, que ocupaba el cargo desde diciembre de 2000, prolongue por tres años más su mandato. Una decisión esperada, puesto que la de Marisa Paredes fue la única candidatura presentada.

El acercamiento de los premios Goya al cine latinoamericano para "acoger una realidad ya presente en el cine español" será uno de los retos que se plantea Marisa Paredes. La actriz es la octava presidenta de la Academia de Cine, un cargo que han ocupado antes José María González Sinde, Fernando Trueba, Antonio Giménez Rico, Fernando Rey, Gerardo Herrero, José Luis Borau y Aitana Sánchez-Gijón.

"Ha sido una votación unánime y aclamada. Nos han dicho que lo habíamos hecho muy bien y que siguiéramos", confesó una radiante Marisa Paredes a los periodistas, momentos después de ser reelegida, y antes de recordar que su primer mandato acababa el próximo mes de diciembre, pero que, tanto ella como Oristrell y Chavarrías, se habían dado cuenta de que quedaban asuntos pendientes por resolver "y por responsabilidad quisimos continuar hasta conseguir lo que habíamos planeado", explicó la actriz.

Entre estos proyectos por concluir destaca la nueva sede de la Academia, una antigua lucha que ahora parece encaminada, como coincidieron en señalar Marisa Paredes y Joaquín Oristrell. El otro, que pronto comenzará a emprender la junta presidencial, es la preparación de los próximos Goya, en una edición que quiere estar marcada por su acercamiento al cine latinoamericano, como explicó Oristrell. "Queremos abrir los Goya al mundo latino y queremos preparar el armazón para que pueda ser así ya el año que viene".

Los responsables de la Academia desean que la fusión que existe entre actores y directores españoles y latinoamericanos se traslade a los premios. "Queremos unos Goya que se abran, claramente, a Latinoamérica, que cuenten con todo ese mundo que es hermano y, a partir de ahí, lograr que ese cine tenga su sitio en los premios, no como invitados, sino como hermanos que son", señaló Marisa Paredes. Tanto la presidenta como Oristrell aseguran que la Academia de Cine es hoy una institución "muy sólida y fuerte y se ha convertido en el gran apoyo del cine español. La Academia es la suma de esfuerzos de todos. Nosotros hemos continuado una labor realizada por mucha gente antes".