La Junta pide la paralización de la obra en la zona regable de Barbate al faltar el estudio de impacto

La Junta de Andalucía ha instado al Ministerio de Medio Ambiente a que paralice las obras del nuevo túnel o canal de desagüe de la laguna de la comarca de la Janda tras comprobar que carece del estudio de impacto ambiental. La petición de la Consejería de Medio Ambiente se produce un mes después de que los ministros Elvira Rodríguez y Miguel Arias Cañete, colocaran el pasado 10 de mayo la primera piedra de esta obra, que está incluida en el Plan Hidrológico Nacional y se realiza a instancias de la Sociedad Estatal de Aguas de la Cuenca del Guadalquivir.

Según el Ministerio de Medio Ambiente, el proyecto del nuevo canal pretende evitar las inundaciones que habitualmente se producen en la laguna de la Janda, que fue desecada en la década de los setenta, pero que se anega cuando arrecian los temporales de lluvia. El canal que se construyó por aquel entonces para evacuar el agua acumulada no es suficiente para retirar todas las balsas que se forman cada cierto tiempo. El nuevo túnel, de 902 metros de longitud, tendría una capacidad de evacuación de 70 metros cúbicos por segundo que, sumados a los 50 del primer canal, permitirían evitar estas inundaciones. Con esta premisa, la ministra de Medio Ambiente, Elvira Rodríguez, acompañada del de Agricultura, Miguel Arias Cañete, colocaron hace poco más de un mes la primera piedra de este proyecto, que cuenta con un presupuesto de 5,72 millones de euros.

La viceconsejera de Medio Ambiente de la Junta, Isabel Mateos, ha remitido un escrito al secretario general del Ministerio Juan del Álamo en el que le solicita que paralice "de manera inmediata" las obras hasta que este proyecto hídrico no se someta al proceso de estudio de impacto ambiental. "El Ministerio considera que no es necesario, pero nosotros sí. Por eso le pedimos que paren el proyecto y sean los técnicos los que evalúen las consecuencias del segundo túnel", explicó ayer José Antonio Gómez Periñán, delegado de la Junta en la provincia de Cádiz.

El coordinador regional de Ecologistas en Acción, Juan Clavero, mostró ayer su satisfacción por la petición de la Junta porque, a su juicio, se trata de "un despropósito medioambiental que terminará por desecar la laguna de la Janda". Según Clavero, este proyecto sólo beneficiará a las plantaciones de arroz en detrimento de las aves que tienen como estación de paso migratorio el caudal hídrico que se genera tras los periodos de lluvia.

La decisión de la Junta se produce después de que varios alcaldes de la comarca de la Janda hayan expresado también sus quejas por este proyecto auspiciado por el Gobierno central. El regidor más beligerante ha sido el primer edil de Vejer de la Frontera, Antonio Jesús Verdú, del PSOE, quien sostiene que bajo este proyecto subyace el interés del ministro de Agricultura y Pesca, Miguel Arias Cañete, como propietario de varias plantaciones de arrozales en una zona cercana.

Verdú advirtió de que la dirección de la Comunidad de Regantes Eugenio Olid, que controla el cauce hídrico de las aguas del río Barbate, está emprendiendo una campaña "con premeditación y alevosía" para "expulsar" de este órgano a los representantes de la Diputación de Cádiz y de los ayuntamientos de la Janda.

Según denunció Verdú, los regantes pretenden controlar en exclusiva las aguas subterráneas y del río Barbate.